| 20 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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De una boda sale otra boda, y de un bautizo... también.
De una boda sale otra boda, y de un bautizo... también.

Kiko Rivera logró sorprender a todos en el bautizo de su hija, incluida su madre

Tanto secretismo, tanto misterio y al final la tonadillera se quedó con las ganas de ver lo más importante de la ceremonia, que iba mucho más allá del bautizo de la pequeña Ana.

| Isabel de Dios Chismógrafo

Salimos de un bautizo y nos metemos... ¡En una boda! No han sido pocos los medios que apuntan que el pasado sábado 12 de marzo fue un día demasiado especial para Kiko Rivera y su pareja, Irene Rosales. Y no, no porque hubieran bautizado a su hija Ana, que también, sino porque fue el momento ideal para que el hijo de Isabel Pantoja hincara la rodilla y le pidiera matrimonio a la joven. De una boda sale otra boda y de un bautizo... también sale una boda.

Ha sido la revista ¡Hola!, la que ha confirmado que sí, que el hermano de Francisco y Cayetano Rivera decidió dar un paso más en su relación con Irene y además de haber creado una familia, ha decidido formalizarlo pasando por el altar. Sería pues otro de los grandes eventos a los que se enfrentará el clan más famoso del papel couché.

¡Nos vamos de boda! es lo que habrán pensado Chabelita y Anabel Pantoja cuando hermano/primo hizo lo que ya adelantó en Sálvame, Kiko Hernández. Todo sucedió en la Hacienda de Santa María, el lugar donde se celebró el convite y donde posteriormente apareció Isabel Pantoja, pues la artista no acudió a la celebración religiosa en la Iglesia de Santa Ana (Sevilla) de la que ESdiario ofreció imágenes en exclusiva.

Aprovechando la coyuntura de que era un día muy festivo para Kiko se lanzó con este romántico 'regalo'. ¿Qué mejor momento que celebrar el amor a la pequeña Ana que celebrando el amor entre sus padres? Eso sí, la que se perdió el gran momentazo fue Pantoja que, según El programa de Ana Rosa, todavía no había entrado al evento.  La tonadillera se trabajó tanto lo de burlar a los periodistas que nadie logró su foto, no, pero ella se perdió el sorpresón de la boda.

Por lo demás, según Pepe del Real, la pedida de mano fue tradicional: Kiko Rivera hincó la rodilla ante Irene Rosales y con una proyección de las imágenes de los años de relación de la pareja le hizo la gran pregunta. Todo un notición para el mundo del corazón y que encamina así al primogénito de Isabel Pantoja hacia una ceremonia que dará muchísimo de qué hablar.