Alarma entre los regantes: la ministra Ribera quiere liquidar los trasvases

En una entrevista realizada por El País, la ministra, que sólo lleva un mes en el cargo, ha manifestado que "repasando los 30 últimos años de nuestra historia, por no remontarnos más atrás, uno se da cuenta de lo que nos cuesta como país, como sociedad, entender la trascendencia que tiene este recurso y la trascendencia que tiene ponerse de acuerdo en cómo utilizarlo".

Y lo más preocupante para los regantes, cuando se le pregunta si ¿pondrá fecha de caducidad al trasvase del Tajo al Segura? La respuesta es toda una declaración de intenciones: “Las aportaciones extraordinarias deben ser eso. Durante muchos años hemos tenido delante el mito del déficit hídrico, cuando en realidad no hay cuencas deficitarias ni excedentarias, porque cada cuenca tiene lo propio de cada una. Puede ser que en algún momento se necesite un apoyo extraordinario, pero hay que dimensionar las cosas y que no pase a ser la regla: lo extraordinario no se puede convertir en ordinario, que todos los meses o todos los años tengamos que hacerlo”, dice Ribera.

Para los representantes agrarios del Levante estas afirmaciones desvelan cierto desconocimiento de la situación e idiosincrasia de esta parte del territorio. El presidente de la Junta General de la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunitat Valenciana (Fecoreva), José Antonio Andújar, hay “un juicio precipitado de los ministra, seguramente por desconocimiento, ya que el trasvase Tajo-Segura es una infraestructura que proyectó en la República el ministro socialista Indalecio Prieto, que se empezó a ejecutar en los años 40 y que se puso en marcha ya en democracia. Es decir, es una aportación ordinaria fruto de una estrategia como país que intentaba paliar el déficit hídrico endémico de esta zona de España y que entraba dentro de un plan para desarrollar la zona levantina”.

Los regantes acusan a la ministra Teresa Ribera de desconocer la necesidades del Levante español en materia de agua

Pero la ministra incendia aún más a los regantes diciendo en El País que los trasvases “plantean problemas muy serios en cuanto al caudal ecológico, de calidad del recurso. Claro que tenemos que garantizar un acceso a agua potable para consumo humano en las regiones más secas, y pensar en cuáles son las necesidades para otros usos industriales y económicos. Pero, en ese caso, las soluciones tienen que ser distintas, más eficientes y hay que partir de una premisa fundamental: no podemos pensar en una política de agua basada en aquello que se demande se tiene que ofertar. No tiene sentido pensar en que vamos a impulsar macrodesarrollos urbanísticos o grandes explotaciones de regadío porque, aunque no haya agua, ya nos la darán”, matiza Teresa Ribera.

En este punto, José Andújar afirma que “nuestros agricultores utilizan y reutilizan cualquier tipo de agua para regar sus cultivos. Nosotros aprovechamos muy eficientemente el agua y sólo pedimos un poco de los 25.000 hectómetros cúbicos que se tiran al mar. Yo la invito a la ministra que se dé una vuelta por el Levante español para conocer las necesidades reales de esta tierra”.

Las declaraciones de Ribera han alarmado sobre manera a los agricultores que otra vez apelan a que desde el PSOE se tenga un solo discurso en un tema de Estado. Mientras Ximo Puig, presidente socialista de la Generalitat Valenciana, comprende las reivindicaciones de los regantes del Levante, desde el Gobierno central, una ministra socialista demuestra, como afirma José Andújar, tener un profundo desconocimiento de la realidad de esta parte del territorio. “La ministra podía preguntarle a su compañero de gabinete, Josep Borrell, sobre la interconexión de cuencas que propuso en aquel plan hidrológico nacional que desgraciadamente no salió adelante. Antes de hablar hay que saber de lo que se habla. Reconozco que lleva sólo un mes, pero se ha precipitado, aunque nosotros estamos dispuestos a enviarle todo la documentación necesaria para que se ponga al día” .