Vox ejerce la 'pinza' a Moreno al mismo tiempo que se ofrece al PP-A como socio

Los movimientos en la búsqueda de alianzas que se ven desde hace meses en los diferentes partidos políticos en Andalucía no han hecho nada más que empezar. Se aproximan las elecciones y cada uno lucha por sus intereses.

Es el caso de Vox, que este miércoles ha asegurado que si en Andalucía se diera un escenario similar al que se ha producido en Castilla y León tras los comicios autonómicos, sería "posible" y "viable" un gobierno de coalición con el PP-A.

Así lo ha manifestado el portavoz de Vox, Manuel Gavira, que ahora tiende la mano al partido del presidente Juanma Moreno, después de mantener desde el año pasado una postura de bloqueo a las acciones del Ejecutivo andaluz. Parece que olvidar la presión ejercida contra el bipartito en asuntos tan importantes como los presupuestos, que fueron tumbados al unirse Vox al PSOE-A y a Unidas Podemos, o el apoyo a las movilizaciones de la sanidad que promocionan los socialistas.

Ahora optan por otro mensaje viendo como se desarrollan los acontecimientos en el plano nacional. Gavira ha afirmado que están dispuestos a ser socios de Moreno, con el requisito de que se cumpliera lo firmado, y ha querido dejar claro que "ni por acción ni por omisión" facilitaría que gobernara el PSOE-A, al que ha calificado como su "enemigo político".

Desde Vox se 'entregan' a una alianza con el PP-A que según los sondeos rozaría la mayoría absoluta, mientras que a los de Abascal les colocan como tercera fuerza política, al igual que ha ocurrido en las urnas en CyL. Se ven como llave para el futuro gobierno de la Junta y Gavira fija sus intereses únicamente en las elecciones. "Salimos a ganar, pero si no ganamos y hay otro escenario, queremos que lo que se pacte y se acuerde se cumpla", ha sentenciado el portavoz de Vox.

Vox quiere eliminar a Cs

La visión creada por el representante de Vox sobre el escenario electoral que se encontrará como posible socio de Moreno provoca que sus críticas se centren ahora en destruir el pacto entre PP y Cs.

El coordinador regional de la formación naranja y vicepresidente, Juan Marín, es el foco de sus ataques. Gavira ha asegurado que los populares no pueden contener la "verborrea" de Marín contra Pablo Casado y que tiene como "rehenes a Moreno y Bendodo" con su propia actitud y la de los consejeros de Cs.

Mientras que el bipartito se mantiene unido y quiere agotar el mandato, Gavira prepara el terreno, consciente de la baja representación que le otorgan las encuestas a Cs. Sin embargo, la escasa utilidad mostrada en el Parlamento a las iniciativas del Ejecutivo de Moreno ha hecho que la distancia entre ambos partidos sea cada vez mayor.