En busca de la soberanía alimentaria ante la crisis provocada por la guerra
El Gobierno andaluz pedirá a la UE que se modifique la PAC para poder cultivar cereales en terrenos de barbecho. También podrían crecer los cultivos de girasol ante la escasez del producto.
Campo de girasoles en Córdoba.
La crisis económica desatada por el estallido de la guerra en Ucrania afecta ya a toda Europa y los gobiernos de las diferentes regiones tratan de poner freno a la escalada de precios de la energía y los combustibles y al aumento de la inflación. Lograr la autonomía y eliminar la dependencia principalmente de Rusia es el objetivo en estos momentos de muchas administraciones.
Es el caso de la Junta de Andalucía que a través de la consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca lanza una propuesta para conseguir la soberanía alimentaria en Europa. La responsable de esta cartera, Carmen Crespo, ha destacado los problemas que azotan a los agricultores y ganaderos que ven como los costes de producción aumentan sin control y se han agravado tras el ataque ruso a Ucrania, sumado a la fuerte sequía que vive la región.
La titular del ramo ha señalado que aprovechará la Conferencia Sectorial de Agricultura convocada para el próximo miércoles, para plantear medidas necesarias ante la repercusión que el cierre de las operaciones comerciales con Rusia y Ucrania está generando ya en toda España. Entre las mismas, Crespo ha detallado que la Comisión Europa debe "adaptar la PAC para que pueda cultivarse con cereales el 5 por ciento que hay establecido como superficie de interés ecológico y barbecho. Es importante que la UE recupere su soberanía alimentaria".
Si la propuesta sale adelante tras la reunión de los Ministros de Agricultura de la UE el próximo 21 de marzo y se aprueban estos cultivos de forma excepcional en terrenos de barbecho, Andalucía podría ser uno de los principales productores no sólo de cereal, sino también de girasol, según ha señalado desde la organización de agricultores Asaja. Este cultivo sería idóneo por sus fechas de plantación y las necesidades de riego, paliando así las carencias de este producto en los mercados.
Respuesta a las alegaciones
La modificación de estos aspectos de la Política Agraria Comín (PAC) no es la única reivindicación que llegará desde Andalucía al Gobierno de España y de Europa. Crespo, ha recordado que la Junta continúa esperando una respuesta a las alegaciones del Plan Estratégico Nacional de la PAC, una oportunidad para "paliar" la situación agravada por la "pertinaz sequía" que sufre la región.
Estas alegaciones se basan en la reclamación de obras e infraestructuras que están pendientes de ejecución y que dependen del Gobierno de Pedro Sánchez, vitales para garantizar la actividad agrícola. Mientras desde la Junta trabajan en la ampliación del decreto de sequía, aprobado en junio de 2021, para ejecutar por la vía de urgencia más infraestructuras hídricas básicas.
Al mismo tiempo, la consejera ha incido en la importancia de aplicar una doble tarifa eléctrica para el regadío "ante una subida de costes de producción inaceptable" o la eliminación del pago del IBI en el campo. Medidas fundamentales para amortiguar la gravísima crisis de este sector primario, del que dependen medio millón de empleo de forma directa.
