Moreno lleva a la economía andaluza a lo más alto espoleado por el turismo

Buenas previsiones económicas para la comunidad andaluza para este año debido a que su economía seguirá creciendo por encima de la media nacional y esto es debido a diversos factores como la recuperación del turismo y la escasa intensidad energética de su sistema productivo. Pero la mejor estimación es, sin duda, que se prevé una bajada del paro hasta un 19,2%.

Así queda reflejado en los datos divulgados por Funcas, el centro de análisis de las antiguas cajas de ahorro, que estima para Andalucía un crecimiento económico de un 4,4%, dos décimas más que la previsión para el conjunto de España, para este año, después de caer un 10% en 2020, aunque menos que la media nacional (-10,8%), y recuperar un 4,8% en 2021, también por debajo de la media nacional (5,1%).

"El impulso fundamental vendrá por la recuperación del turismo, tanto nacional como internacional", ha apuntado Funcas, que advierte no obstante que "no será una de las regiones especialmente favorecidas por los fondos europeos, dada su estructura productiva, menos orientada hacia actividades de mayor contenido tecnológico".

Sin embargo, también anota que "le favorece la reducida intensidad energética de su sistema productivo en comparación con el resto de regiones". De acuerdo con este escenario, la tasa de desempleo media anual descenderá hasta el 19,2%, marcado por la creación de empleo en el sector servicios.

Así queda patente que Gobierno andaluz de PP y Cs no puede desatender ni un detalle del sector que consigue mantener el nivel de crecimiento, el turismo, porque la singularidad de sus ciudades, monumentos, tradiciones y fiestas, playas y espacios naturales siguen siendo un reclamo mundial.

También del sector primario más estable que el anterior durante la pandemia, aunque ahora lastrado por el incremento de costes que tiene a agricultores, ganaderos y pescadores asfixiados. Por ello, al mismo tiempo la Junta ha querido diversificar, apostando por la innovación tecnológica como otro de los pilares donde apoyarse y ser capaz de atraer mayores fondos. La tendencia cambia y la región lidera desde los tres últimos años barómetros impensables, al reducir las trabas burocráticas y presión fiscal.

El turismo es el gran diferenciador entre regiones

Se trata de un análisis que, en términos generales, prevé que todas las comunidades continúen este año la senda de recuperación iniciada el año pasado, aunque, salvo Canarias, frenarán su ritmo de crecimiento.

Serán Baleares y Canarias las liderarán el crecimiento del PIB en 2022, con un 9,9% y un 7,8%, respectivamente, gracias a la normalización del turismo nacional e internacional. Aunque ambas también se situaron a la cabeza en 2021 (10,8% Baleares y 7% Canarias), son las regiones que todavía se encuentran más lejos de los niveles prepandemia por el fuerte castigo sufrido en 2020 (-21,7% y -18,1%, respectivamente).

En el extremo contrario se sitúan Cantabria, Extremadura, Castilla y León, Aragón y Castilla-La Mancha con crecimientos del PIB este año del 3,3%, por debajo de la previsión para la media nacional (4,2%). En general, las regiones "con escasa importancia del turismo exterior, un sector industrial débil y un peso elevado de la agricultura" fueron las que sufrieron una menor caída del PIB en 2020 "y por tanto las que están registrando un menor efecto rebote posterior".

Además, señala que hay varios factores que afectan negativamente a la actividad económica y generan dudas sobre el nivel de cumplimiento de las previsiones, como "el incremento de los costes de producción, la escasez de suministros industriales, el aumento de la inflación, que reduce la capacidad de gasto de las familias, la incertidumbre derivada del conflicto bélico en Ucrania y la subida de tipos de interés prevista para la segunda mitad del año".