La Junta planta cara a Sánchez por imponer su Selectividad sin contar con nadie

La puesta en marcha de la nueva prueba de Selectividad propuesta por el Gobierno ha enfadado a algunas comunidades, no solo por el fondo del examen de acceso a la universidad, sino también por las formas del Ejecutivo, que no había dado a conocer el borrador del texto a los responsables autonómicos, que han tenido que enterarse por los medios de comunicación.

La consejera de Desarrollo Educativo y Formación Profesional de la Junta de Andalucía, Patricia del Pozo, ha expresado este jueves su preocupación por la propuesta de nueva Selectividad que ha planteado el Gobierno central, "sin diálogo" previo con las comunidades autónomas.

En declaraciones a Canal Sur Radio, Del Pozo ha manifestado que el documento fue conocido primero a través de un medio de comunicación y luego fue remitido a las comunidades, media hora antes de que se convocara la Conferencia Sectorial, con lo que no hubo posibilidad alguna de analizarlo. Así, ha criticado las "formas" con las que el Gobierno ha planteado este asunto y ha expresado su preocupación por la Selectividad que se está proponiendo.

De hecho, la consejera ya había emitido un comunicado este miércoles en el que dudaba de que "haya una voluntad real de escuchar a las comunidades, de que haya un debate y una reflexión seria, con comisiones técnicas previas, y que podamos abordar esta disfunción evidente y lograr un consenso". En este sentido, ha recordado que Andalucía tiene el sistema educativo más grande de España, con más de 1,7 millones de estudiantes, más de 135.000 de ellos en bachillerato.

Además, según Del Pozo, si el curriculum de bachillerato es en gran parte homogéneo en todo el territorio y la matriculación universitaria funciona como un distrito único en todo el país, "no tiene sentido que haya 17 pruebas distintas para acceder a la universidad", algo que ocurre que muy pocos países europeos.

"Camina en sentido contrario a la excelencia educativa"

De hecho, ha añadido que "la reflexión que hacemos es que esta propuesta ahonda en un modelo, el de la Lomloe, que no compartimos porque no resuelve los problemas más importantes de la educación y camina en sentido contrario a la cultura del esfuerzo y a la excelencia educativa".

Así, ya ha avanzado que hay de plazo hasta el 15 de septiembre para presentar alegaciones a la propuesta del Gobierno, de manera que van a trabajar para tratar de "reconducir la situación", poniéndose a disposición del Ministerio de Educación para "conseguir que Andalucía y España disfruten de una educación de calidad y excelencia sin dejar a ningún estudiante atrás".