El PSOE se hunde en su feudo histórico por el rechazo de los barrios obreros
La basura y la pobreza 'devora' la capital andaluza mientras que el Ayuntamiento hispalense con Antonio Muñoz (PSOE) al frente sólo ha ejecutado el 11% de su presupuesto para los distritos.
La capital de Andalucía ha sido noticia en diversas ocasiones por encabezar la lista de los barrios más pobres de España según el Instituto Nacional de Estadística. En este 2022 los tres primeros puestos del ranking son sevillanos: Los Pajaritos, Polígono Sur y Amate y en ellos se registran las rentas más bajas por habitante del país.
Un panorama demoledor para una de las ciudades más importantes de Andalucía y del país, que cada día que pasa empeora debido al profundo abandono del Ayuntamiento de Sevilla, que mira hacia otro lado mientras estos barrios se deterioran a una velocidad asombrosa.
El alcalde de Sevilla, Antonio Múñoz (PSOE-A), parece no abochornarse ante estos datos y cuando queda la recta final del año, en seis meses sólo ha ejecutado un 11% del presupuesto destinado a inversiones en los diferentes distritos, entre ellos algunos de estos en los que se está convirtiendo en una misión imposible vivir con dignidad. Es el caso del distrito Sur que no ha recibido ni un céntimo de inversión o Cerro-Amate, donde se emplazan los barrios Amate y Los Pajaritos, en el que sólo se ha ejecutado poco más del 7%.
Sevilla nunca ha estado más sucia
Los socialistas prefieren otro tipo de inversiones más ligadas a la imagen de cara al exterior y potencian esa parte de la ciudad que se exportan con facilidad: el casco antiguo y Triana, que, aunque tampoco salen muy bien parados, son los dos distritos en los que se ha alcanzado los máximos de ejecución del presupuesto con un 26 y 39%, respectivamente.
Imagen de la Alameda, en pleno centro de Sevilla.
El regidor sevillano podría presumir desde la Giralda de un entorno atractivo, pero si mira un poco más allá su gestión desaparece, tanto como durante su etapa como concejal de Hábitat Urbano en esta legislatura como en su cargo de alcalde tras suceder en enero a Juan Espadas, que iniciaba su infructuosa carrera a la presidencia de la Junta.
De los cuatro millones que el Consistorio ha presupuestado para este año ha gastado sólo 463.560 euros, un 11,26%. Y mientras la suciedad invade toda Sevilla, hasta la que recorren los turistas que tampoco se salva de la estampa de contenedores desbordados de bolsas de basura, mugre incrustada en las aceras, ratas o jardines sumidos en la dejadez. Sumado a otro gran problema: el de los apagones eléctricos por los enganches de luz ilegales que se suceden en los barrios menos favorecidos ante las continuas protestas de los vecinos.
El malestar cada vez es mayor y Muñoz se enfrenta a unos ciudadanos cada vez más enfadados en la calle y también a la oposición del PP, Ciudadanos y Vox que en cada pleno municipal denuncia esta situación. "Esto se traduce en que los barrios seguirán estando igual de sucios y abandonados ya que el alcalde socialista Muñoz no es capaz de ejecutar los presupuestos, algo que nos resulta una vergüenza", ha destacado el candidato del PP a la Alcaldía de Sevilla, José Luis Sanz, tras conocer estos datos.
Y todo ello a las puertas de unas elecciones municipales en 2023 y con el rechazo de los sevillanos en las urnas el pasado mes de junio en los comicios autonómicos, en los que por primera vez el PSOE perdió la capital frente al PP.