Los 100 días en la oposición del PSOE en Andalucía con Espadas ya en la picota
La carrera del exalcalde de Sevilla pendiente de los resultados de los socialistas en las municipales de mayo, donde la corrupción podría marcar una segunda derrota que sería inasumible.
El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con el secretario del PSOE-A, Juan Espadas.
Esta semana se cumplen los primeros 100 días del Gobierno del Partido Popular al frente de la Junta de Andalucía. Su primera victoria por mayoría absoluta y también el primer mandato en solitario, sin necesidad de contar con socios, y motivo para hacer balance del trabajo realizado. Pero en el otro lado de la moneda también se cumplen 100 días agónicos desde la derrota más dura que ha vivido el PSOE en la comunidad con su secretario general Juan Espadas al frente.
Esta ha sido el primer gran fracaso socialista después de gobernar 37 años consecutivos en la Junta, ya que las elecciones de 2019 las consiguió ganar Susana Díaz pero el escaso margen que logró de 33 diputados no fue suficiente para evitar el cambio en el Gobierno por el pacto entre PP (26 escaños) y Ciudadanos (22 diputados).
A pesar de ser el 'fiel embajador' de Sánchez y su política en el sur de España, Espadas podría tener los meses contados, ya que desde Ferraz pueden estar poniendo como fecha tope de su continuidad mayo de 2023.
Su sucesor, Juan Espadas, no lo ha hecho mejor y ha recibido el castigo en las urnas otorgando al PSOE-A el peor resultado de la historia (30 escaños) en el que ha sido su feudo, viendo como el mapa de Andalucía se teñía de azul, venciendo el PP en ciudades como Sevilla donde nunca se había producido un cambio de signo político en unas autonómicas.
Espadas, el candidato escogido por el líder del PSOE Pedro Sánchez, encajó como pudo la derrota y en estos primeros meses como líder de la oposición ha basado su trabajo en lanzar continuas críticas contra Moreno y escasas propuestas.
No le gusta la bajada de impuestos, ni los presupuestos elaborados por el Ejecutivo a pesar de las cifras récord para sanidad o educación, tampoco los planes de inversión en materia hídrica contra la sequía. Lo que prefiere el senador y exalcalde de Sevilla es 'tapar' el trato discriminatorio del Gobierno central con Andalucía en el reparto de fondos y 'vender' los fondos europeos que llegan a la región como si fueran propios.
La 'cabeza' de Espadas podría rodar
A pesar de ser el 'fiel embajador' de Pedro Sánchez y su política en el sur de España, Espadas podría tener los 'meses' contados, ya que desde Ferraz pueden estar poniendo como fecha tope de su continuidad mayo de 2023.
El socialista Espadas ha sido arrollado, con la losa carga de Sánchez, por el "huracán Moreno".
Los resultados del PSOE-A en las elecciones municipales serán determinantes para conocer el futuro del actual secretario general y los pronósticos son poco halagüeños si siguen la senda de los comicios autonómicos.
Espadas, el candidato escogido por el líder del PSOE, encajó como pudo la derrota y en estos primeros meses como líder de la oposición ha basado su trabajo en lanzar continuas críticas contra Moreno y escasas propuestas.
A todo ello se suma un año donde la corrupción acorrala al PSOE. Los juicios y sentencias condenatorias se suceden: el caso ERE con Chaves inhabilitado y Griñán a punto de entrar en prisión, Isofotón, Invercaria, Fitonovo y la Faffe son las principales causas que ocupan la información nacional y Espadas trata de escabullirse de hacer reflexiones al respecto o reconocer errores.
Ejemplo de ello el último cónclave socialista en Sevilla con Sánchez y el expresidente del Gobierno, Felipe González para presumir de legado pero omitir los millones dilapidados de forma fraudulenta, creando un sistema clientelar para mantener al PSOE en el poder según confirman los tribunales.
