19 testigos narrarán el ataque del yihadista de Algeciras ante el juez
Entre los citados se encuentran los compañeros de piso del presunto autor del asesinato de un sacristán y el sacerdote que fue víctima del ataque terrorista y herido con un machete.
Ataque en Algeciras de un yihadista que asesinó a un sacristán.
El juez de la Audiencia Nacional Joaquín Gadea ha citado los días 15, 16 y 17 de febrero a un total de 19 personas, entre testigos y perjudicados, por el ataque cometido por un joven marroquí en la localidad gaditana Algeciras el pasado mes de enero, en el que fue asesinado un sacristán y resultaron heridas varias personas.
Según fuentes fiscales, las declaraciones de los dos primeros días serán por videoconferencia e incluirán las de los compañeros de piso del presunto autor del atentado, mientras que los perjudicados lo harán de forma presencial el 17 de febrero. Entre ellos se escuchará el testimonio del sacerdote salesiano Antonio Rodríguez Lucena, que se salvó de la muerte tras ser atacado por el presunto yihadista Yassine Kanjaa con un machete en la iglesia de San Isidro.
El procedimiento contra el atacante continúa, después de que el magistrado de refuerzo del Juzgado Central de Instrucción Número 6 ha puesto fecha a unas diligencias que acordó en un auto del pasado 31 de enero, el mismo en el que instó a que se realizase un examen psiquiátrico del presunto yihadista, debido a que podría sufrir problemas mentales, a los efectos de informar sobre su imputabilidad.
El asesino confeso está en prisión
El juez Gadea decretó el pasado 30 de enero, tras escuchar al presunto yihadista en sede judicial, prisión provisional sin fianza, y le atribuyó los delitos de asesinato y lesiones con fines terroristas que, advirtió, podrían conllevar la prisión permanente revisable.
En su resolución el juez indicaba que la actividad desarrollada por Yassine Kanjaa se podía calificar como un ataque yihadista dirigido tanto contra sacerdotes que profesan la fe de la Iglesia Católica como contra musulmanes que para el investigado no siguen los preceptos del Corán.
El instructor hacía constar en su auto que en las dos declaraciones que ha prestado ante la policía y en el juzgado, salvo algunas contradicciones sobre elementos periféricos del relato, era capaz de reproducir en esencia los aspectos más importantes de su acción.
Relataba que la conducta del investigado fue consciente y que tenía definidos sus objetivos, teniendo la opción de causar unos daños mayores, focalizó su acción concretamente sobre los sujetos a quienes atacó, a los que eligió de forma deliberada.
Y explicaba que la primera de las acciones fue contra los sacerdotes, reconociendo que su intención era matar a todos los sacerdotes que se encontraban en la iglesia. En segundo lugar, indicaba el magistrado, centró su ataque contra un marroquí al que consideraba infiel, al creer que estaba ante un marroquí converso, por no practicar la auténtica religión, y al que agredió con intención de matarle.
