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Moreno recuerda al PSOE cómo miró para otro lado mientras esquilmaban Doñana

El presidente denuncia el ataque a la autonomía de la ministra Ribera y exige al Gobierno que cumpla con las obras hídricas para que se deje de "pinchar y secar Doñana" como en el pasado.

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, en la sesión de control en el Parlamento.

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El debate sobre la proposición de ley sobre la regularización de los regadíos en el entorno de Doñana llenó de opiniones e imágenes de la sesión la actualidad informativa, con espectáculo incluido por parte de Adelante Andalucía que vació un vaso de arena del espacio natural sobre el escaño del presidente Juanma Moreno. Y este jueves le ha tocado al líder andaluz contestar a los ataques recibidos, los más duros de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, que tras la aprobación para iniciar la tramitación de la ley, acusó a Moreno de actuar "con la soberbia del señorito".

Ha sido durante la sesión de control donde Moreno ha lamentado que el Gobierno de la Nación "cuestione, recurra, golpee, limite y empequeñezca la autonomía" de Andalucía "todos los días" y ha sostenido que el Gobierno andaluz "no ha engañado a nadie" con la ley. También ha reprochado su cinismo al líder del PSOE, Juan Espadas, y le ha encomendado que "le pida a su jefe", Pedro Sánchez, que cumpla con la obra hídrica comprometida por el Estado en Huelva de la trasferencia de agua del tunel de San Silvestre para que los regantes tengan agua, para que se deje de hacer lo que se hacia antes, "mientras el PSOE miraba para otro lado, que ha sido pinchar el subsuelo y secar Doñana", en referencia a la permisividad que provocó que afloraran pozos ilegales durante décadas con los gobiernos socialistas en la Junta.

El presidente andaluz en la sesión también ha arremetido contra las declaraciones de Ribera, al hablar del "rinconcito de Andalucía" a cuenta de la pregunta de la portavoz de Por Andalucía, Inmaculada Nieto (IU). "Póngase a defender a Andalucía cuando se golpea con esa dureza a una de las comunidades autónomas más poblada. Tenemos dignidad y autonomía para decidir", ha reprochado Moreno a Nieto. "Con honestidad e integridad, creemos que es la única alternativa posible" para cientos de agricultores con hectáreas de riego no regularizadas.

Feijóo respalda al presidente andaluz

El líder del PP, Alberto Nuñez Feijóo, ha expresado su respaldo a la Junta de Andalucía ante las acciones que está realizando para resolver los "problemas" de las familias afectadas en el parque de Doñana y ha cargado duramente contra el Gobierno de Pedro Sánchez por llamar "señorito soberbio" al presidente Moreno, y dedicarse a "enfrentar" autonomías en vez de sentarse a buscar soluciones. Es más, ha destacado la escasa crecdibilidad que tiene el Gobierno por la preservación del Parque de Doñana "porque lleva muchos años sin cuidarlo".

Ahora nadie se cree que al Gobierno le interese el Parque de Doñana porque lleva muchos años sin cuidarlo.

"Lo primero que tiene que hacer el Gobierno de España es tener un mínimo de rigor en su política hidráulica, dejar de enfrentar a las comunidades autónomas y no dejar tirados a centenares de familias que están buscando una solución", ha declarado Feijóó.

La Comisión Europea se pronuncia

Este mismo jueves tambén ha tomado cartas en el asunto la Comisión Europea a través del portavoz Tim McPhie, que ha advertido a España de los efectos "adversos" para el ecosistema del humedal de Doñana que implica la ampliación de regadíos impulsada por la Junta de Andalucía y ha recordado que se debe dar cumplimiento a la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) que obliga a garantizar su protección. Así ha señalado que tendrá la posibilidad de adoptar nuevas medidas para garantizar que España cumple la sentencia del TJUE, entre las que se incluyen posibles sanciones monetarias.

Mientras el Gobierno andaluz quiere fijar una reunión con Bruselas para explicar de primera mano la proposición de ley, argumentando que no atenta contra el acuífero ni legaliza pozos, sino que señala que el riego vendrá derivado del uso de aguas superficiales, una vez que se efectúen las obras hídricas que lo permitan.