Espadas zanja la Faffe y se olvida de la investigación del 'enchufe' de su mujer

El secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, ha querido dar por cerrado este jueves uno de los capítulos más escandalosos cometidos durante los sucesivos gobiernos socialistas en la Junta de Andalucía, como ha sido la utilización de los fondos de la Fundación Fondo Andaluz de Formación y Empleo (Faffe), que debía dedicarse a ayudar a los parados de Andalucía, para el pago de juergas en prostíbulos.

El bochorno es máximo para el Partido Socialista, que acumula también la corrupción del caso ERE, tras conocerse la sentencia condenatoria al exdirector de la Faffe, Fernando Villén, y la exdirectora Financiera, Ana Valls, a seis y cinco años de prisión, respectivamente. Villén utilizó hasta en 40 ocasiones el dinero público esta Fundación, para pagar servicios en locales de alterne, donde se llegó a gastar 32.566 euros en prostíbulos de Sevilla y otras provincias, mientras que Valls se encargaba de 'camuflar' los movimientos de dinero en las cuentas del ente. Sobre ambos pesan los delitos de malversación continuada y falsedad documental, Villén como inductor y Valls como autora.

La gravedad de los hechos es máxima y al líder socialista andaluz no le ha quedado más remedio que pronunciarse sobre la Faffe. Juan Espadas ha indicado que espera que, una vez se ha dictado la sentencia sobre los pagos en prostíbulos, se pueda "definitivamente zanjar" un tema que "evidentemente", ha agregado el dirigente socialista, es "muy vergonzoso".

La Faffe continúa con los 'enchufes'

Así ha reaccionado Espadas a las preguntas de los periodistas antes de participar en un acto en Granada, donde ha llegado a destacar "la gravedad de los hechos por la persistente repetición" de hasta 40 "actos de apropiación de fondos públicos". Sin embargo, Espadas se ha olvidado de que la investigación sobre el funcionamiento irregular de la Faffe no se cierra con esta sentencia.

Aún queda por esclarecer las presuntas irregularidades cometidas en el proceso de contratación que se llevó a cabo en la Faffe, durante los diez años en los que estuvo en funcionamiento el ente, con un proceso abierto en el Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla. Además se da la casualidad que entre las personas cuyo contrato 'exprés' está en duda es el de la mujer de Juan Espadas, Carmen Ibanco, a la que la Guardia Civil citó como investigada, aunque luego el juez desestimó su declaración como tal hasta que la UCO presente

Difícilmente puede darse por "zanjado" el asunto, aunque este sea el 'deseo' del secretario del PSOE-A, porque la Faffe está pendiente de esta investigación judicial por la contratación, presuntamente, irregular de 84 personas en la fundación (posteriormente absorbidas por el Servicio Andaluz de Empleo al extinguirse la Faffe), entre las que se encuentra Ibanco.

También estará en el foco del Parlamento

La declaración que hizo la mujer de Espadas ante la comisión de investigación de la Faffe en el Parlamento, donde sus explicaciones sobre la forma en la que accedió a su puesto de trabajo fueron uno de los detonantes de este presunto caso de enchufismo. Ibanco narró como vió el anuncio en un periódico y en escasos días ya formaba parte de la plantilla, así como la manera en la que desarrollaba su trabajo, por lo que fue conocida popularmente como la ‘worperfe’, en referencia a un programa informático que usaba.

Además, en los próximos años no se librarán de seguir escuchando hablar de las actividades de la Faffe en el Parlamento andaluz, donde esta legislatura se retoma la investigación para depurar responsabilidades políticas y se ha pedido la comparecencia de varios 'pesos pesados' del PSOE, como la del expresidente de la Junta Manuel Chaves o de la actual ministra en funciones de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, que fue consejera de la Junta.