El día después en el instituto de Jerez: con ayuda y la sombra del acoso escolar
El regreso al centro tras el ataque de un alumno de 14 años a sus compañeros y profesores está siendo complicado, también para el agresor que ha pasado la noche en el calabozo.
Alumnos del IES García Armada de Jerez en el patio del centro.
El día después del ataque vivido en un instituto de Jerez, donde un estudiante de 14 años apuñaló a dos alumnos y tres profesores, no es de normalidad, porque el suceso ha causado un gran impacto en toda la comunidad. El centro ha reunido a primera hora de la mañana a la plantilla de profesores para recibir ayuda e información de las consejerías de Educación y Salud de la Junta sobre cómo tratar a los alumnos después de lo ocurrido.
A media mañana se irán incorporando los 700 alumnos del instituto, acompañados por sus tutores y especialistas de atención emocional, para hablar de lo ocurrido, porque no habrá clases ordinarias. Y es que no sólo el episodio de violencia ha marcado la vida en este centro, sino que son varios los testigos que apuntan a que el joven podría haber estado sufriendo acoso escolar. Le hacían "bromas pesadas", como la que vivió el día anterior, que pudo ser el detonante de su reacción.
Una jornada dura después del ataque del menor, que sacó dos cuchillos y agredió a compañeros y docentes, aunque la mayoría sólo sufrieron heridas leves y la única que presentaba mayor gravedad, al haber sido alcanzada en un ojo, fue una profesora que fue intervenida y dada de alta.
El menor pasa del calabozo a declarar
Mientras que los alumnos del IES García Armada de Jerez intentan reponerse del susto, el autor, que fue detenido minutos después del ataque sin resistirse y espetando a los agentes una dura frase: "He estallado, ya no podía más", ha pasado la noche en los calabozos de la la comisaría de la ciudad gaditana, en el área de custodia para menores.
Está previsto que durante la mañana de este viernes pase a disposición de la Fiscalía de menores que le tomará declaración y este fin de semana el juez tendrá que decidir sobre su ingreso en un centro.
De manera simultánea, algunos de los alumnos que fueron testigos de los hechos también han prestado declaración ante la Policía, acompañados por sus padres, ya que se investiga cómo fue el ataque pero también si el menor fue víctima de bullying por parte de otros alumnos. Al respecto tanto la consejería de Educación como el propio centro han negado que se hubieran producido conflictos previos y que estuviera activado el protocolo contra acoso escolar.