Dos caras de la violencia machista: una mujer apuñalada y una condena ejemplar
La sociedad andaluza vive sentimientos encontrados: de rabia, tras conocer una violenta agresión que ha llevado a la UCI a una mujer en Granada, y 'alivio' por el castigo para un asesino.
La jornada de este miércoles ofrece dos caras en lo que respecta a la violencia de género en Andalucía. Por un lado, en la localidad de Armilla, en Granada, están conmocionados tras conocer la agresión que se produjo a última hora del martes y que ha dejado herida de gravedad e ingresada en la UCI a una mujer de 47 años. En el otro lado de la balanza, llega una sentencia ejemplar para un asesino que se ensañó con su ex compañera sentimental, y que, al menos, trasmite a la sociedad que pagará un duro castigo por ello.
Con respecto a la agresión que ha tenido tenido lugar en el pueblo de Granada y que se investiga como violencia de género, ha sido detenido un hombre de 54 años acusado de apuñalar a su mujer en el domicilio familiar en presencia de sus dos hijos menores. Fue uno de ellos el que pidió ayuda a los vecinos. La víctima fue trasladada al Hospital Universitario Clínico San Cecilio, donde tuvo que ser intervenida de urgencia, y allí permanece en estado grave en la UCI, según confirman desde la Junta.
La mujer agredida, al parecer, estaba en proceso de divorcio de su agresor, aunque convivían juntos por temporadas. El hombre tenía antecedentes por violencia de género y la pareja se encontraba en el Sistema de Seguimiento Integral en casos de Violencia de Género (VioGén), aunque el caso estaba "inactivo" desde el año 2012.
Se aceptan todos los agravantes: 28 años de prisión
Mientras la mujer de Granada lucha por vivir en el hospital, llega una noticia que genera cierto alivio, solo, por la sentencia a 28 años de cárcel que ha dictaminado la Audiencia Provincial de Almería ha condenado para el hombre que asesinó brutalmente a su ex pareja sentimental, Inmaculada Z.M.O., de 48 años, en el año 2021 en Roquetas de Mar.
Se ensañó con ella, la abordó en la calle de noche y la golpeó, "sin posibilidad de que pudiera defenderse", en la cabeza, en "excesivas" ocasiones. Su gran corpulencia la aprovecho para utilizar una "una piedra de hormigón de grandes dimensiones" (cinco kilos), con la que la desfiguró.
El presidente del tribunal, el magistrado Ignacio Ángulo, acepta la petición de la fiscal y la acusación particular ejercida por la Junta de Andalucía y le impone 25 años como autor de un delito de asesinato, además de un año de cárcel por un delito de quebrantamiento de condena y dos años de prisión por un delito de coacciones.
El veredicto, dictado por unanimidad, considera además acreditada la concurrencia de las tres agravantes solicitadas por el Ministerio Público. Entre ellas, que, en su intento por retomar la relación que rompió la víctima (a la que acosaba), existía "una concepción machista y de superioridad del acusado, al no respetar la voluntad y decisión de la fallecida, considerándola inferior y de su propiedad, cosificando a la misma".