Los agentes desmantelan en Andalucía el gran 'vivero' de Europa de la marihuana
Guardia Civil y Policía Nacional encadenan una operación con otra para acabar con las plantaciones de marihuana, con Granada como uno de los puntos del país con los clanes más activos.
Operación de la Guardia Civil en la provincia de Granada contra el cultivo y tráfico de marihuana.
Las operaciones que están llevando a las fuerzas de seguridad han evidenciado que Andalucía sigue siendo el lugar predilecto de las mafias para cultivar marihuana. De punta a punta, de Almería a Huelva, los agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional se afanan en desmantelar estos cultivos, a los que no les hace falta grandes extensiones de terreno, ya que se crían de forma discreta en el interior de viviendas en su mayoría.
Para conocer el funcionamiento de los clanes que operan en el sur de España, ESdiario se ha puesto en contacto con fuentes de la Guardia Civil de Granada, ya que esta provincia es la mayor exportadora de España de marihuana. Y es que esta sustancia estupefaciente se cultiva en nuestro país pero se distribuye y vende en su mayor parte en Europa. Los destinos más frecuentes son Alemania, Italia o Polonia.
Detrás de estos cultivos están auténticos clanes que controlan la producción y tráfico. Un negocio de lo más rentable, pero que arrastra detrás criminalidad, como puntualiza la Guardia Civil, que destaca que cada vez son clanes más violentos, tienen más armas y la rivalidad entre ellos deja muertos a su paso, como los dos últimos casos de fallecidos relacionados con el tráfico de drogas en Granada.
Miles de plantas incautadas
Sólo en esta última semana ciframos varias operaciones que demuestran que los traficantes están muy activos, pero también los agentes, que desmantelan estas plantaciones por toda la comunidad.
El último gran caso tiene su epicentro en la provincia de Granada, donde la Guardia Civil lleva a cabo la operación de alto impacto Nazarí Ordo, que acaba de desencadenar la detención de 16 vecinos de Iznalloz por delitos contra la salud pública por cultivo y elaboración de droga y por defraudación de electricidad, así como investigan a otras diez personas. En total han desarticulado 18 nuevos centros de producción de marihuana donde se han incautado de 3.257 plantas de cannabis sativa y de dos kilos de marihuana que los narcotraficantes ya tenían dispuestos para la venta.
Dentro de la misma operación también esta semana se han desarticulado otros seis nuevos centros de producción de marihuana, uno en Zújar, uno en Salar y tres en la localidad de Güevéjar, con un total de 2.468 plantas incautadas. A ello se suman seis kilos y medio de marihuana y un kilo y medio de éxtasis dispuestos para la venta que han sido localizados los agentes, mientras que siete personas han sido puestas a disposición judicial por un delito contra la salud pública por cultivo y elaboración de droga y por otro de defraudación de electricidad.
Este mismo jueves también con dos detenidos por la Policía Nacional en San Fernando (Cádiz) como presuntos responsables de una plantación tipo indoor ubicada en una vivienda de la barrio de la Bazán y donde se intervinieron un total de 472 plantas.
El miércoles la Policía Nacional ha desarticulado un clan familiar de nacionalidad española, como presuntos autores de un delito de tráfico de sustancias estupefacientes en una finca rústica situada en el término municipal de Motril, donde los agentes se han incautado de 6,5 kilos de cogollos de marihuana preparados para su distribución, así como más de 15 kilos de plantas en proceso de secado.
Los enganches de luz dan la alerta
Estos sólo son algunos casos de los muchos que se suceden en toda la comunidad y de los que tenemos noticias gracias a la efectividad de los agentes que conocen bien a estas mafias de la droga. Se trata de cultivos indoor en habitaciones de pisos y casas, así que sólo hace falta que haya suministro de agua y de luz para que crezcan las plantas de marihuana.
Este último suministro, el de electricidad, es el que suele activar las alertas en los cuerpos de seguridad, puesto que habitualmente donde hay cultivos hay problemas en el suministro para los vecinos de la zona. Esos enganches ilegales a la red generan quejas de los residentes y dan la pista a los investigadores, ya que el elevado consumo de luz que necesitan para cultivar estas plantas en interior saturan la red y generan cortes al resto de vecinos.
Además, en la operación desarrollada en Granada entran en juego en este fraude en el servicio eléctrico los propios técnicos de la compañía suministradora, que ayudaron, supuestamente, en los enganches en un total de 28 viviendas de la localidad de Iznalloz.