La familia de uno de los militares muertos busca responsables y apunta alto
Los familiares del soldado fallecido junto con un cabo en un ejercicio en la base de Cerro Muriano no se conforma con la retirada del capital y señala a los mandos superiores del Ejército.
Entierro del cabo Miguel Ángel Jiménez, fallecido en unas maniobras, en Adamuz, Córdoba.
La muerte de dos militares durante unas maniobras en la base de la Brigada Guzmán el Bueno X de Cerro Muriano, en Córdoba, sigue generando muchas dudas sobre las medidas de seguridad aplicadas durante este entrenamiento en el que los dos soldados fallecieron ahogados en un lago.
El soldado Carlos León Rico, de 24 años, y el cabo Miguel Ángel Jiménez Andújar, de 34 años, militares de tropa del Regimiento de Infantería La Reina 2, murieron por ahogamiento cuando se realizaba un ejercicio de paso de cursos de agua con equipo completo en el embalse situado en el Campo de Maniobras. Eran las nueve de la mañana y la temperatura muy baja cuando efectuaron el entrenamiento que, además de los dos fallecidos, provocó que otros dos soldados fueran hospitalizados por hipotermia.
Tras el suceso, el Ejército de Tierra tomó medidas y retiró al capitán que estaba al mando de las maniobras, pero el caso está siendo investigado en el juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba y en la causa se persona la familia de uno de los fallecidos, Carlos León, un joven natural El Viso del Alcor (Sevilla), que ha anunciado que prevé formalizar este viernes su denuncia contra el capitán responsable del ejercicio y sus tres superiores inmediatos.
Presunto "homicidio imprudente"
El letrado Luis Romero, que representa a la familia del difunto soldado Carlos León, que llevaba sólo siete meses en el Ejército, ha informado de que la denuncia se dirige contra dicho capitán retirado del mando, el teniente coronel inmediatamente superior a él, otro coronel y un general, con petición de que todos ellos sean llamados como investigados al procedimiento judicial.
Las diligencias previas, según el letrado, giran en torno a dos presuntos delitos de homicidio imprudente, toda vez que ambos efectivos fallecieron ahogados en un lago de la base, realizando un ejercicio práctico. En el mismo "participaban, entre otros, los nuevos militares que se habían incorporado hacía pocos meses del Centro de Formación, los cuales, a la finalización de este, recibirían la tradicional boina de la unidad", según ha precisado Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME).
Los detalles de las maniobras
La asociación ha solicitado "información sobre el número de horas, recogidas en el Plan de Instrucción, que realizó el personal de nueva incorporación que participaba en el ejercicio, con el fin de aprender los procedimientos que se deberían poner en práctica para saber reaccionar en las situaciones ambientales en que se realizó el ejercicio dentro del embalse".
También quiere saber la asociación de militares profesionales, "si el ejercicio de paso de cursos de agua estaba recogido en la programación de las maniobras y qué medidas de seguridad y sanitarias se tomaron", tales como la "presencia de ambulancia, de médico, de sanitarios, etcétera".
