El respaldo a Moreno en Málaga choca con la soledad de Espadas en Doñana
PP y PSOE eligen formatos muy distintos para el arranque de la campaña a las europea: los populares buscan cercanía con el público y el PSOE se 'camufla' en la marisma en un acto 'íntimo'.
Las primeras imágenes del inicio de la campaña para las elecciones europeas de los dos grandes partidos, PP y PSOE, este pasado jueves en Andalucía, son tan diferentes como las intenciones de sus líderes. Los 'populares' han celebrado su acto en la localidad costera de Fuengirola (Málaga), con numeroso público pero en un ambiente acogedor, donde se confía plenamente en la figura del presidente del PP-A, Juanma Moreno, y su liderazgo para arrastrar los votos necesarios y "enseñar la puerta de salida" al presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez.
En contraposición, los socialistas han elegido un escenario idílico como son las marismas de Doñana, en Huelva, pero para celebrar un arranque de la campaña electoral 'intimo' porque el líder de la federación andaluza, Juan Espadas, ha estado rodeado por un reducido grupo de dirigentes y militantes socialistas. El PSOE-A sigue las directrices de Ferraz y se va a Doñana recordando la visita de su principal candidata a los comicios europeos Teresa Ribera, aunque en este territorio onubense han ido perdiendo respaldos en la mayoría de los pueblos y la diputación.
Espadas 'huye' de la calle' igual que su jefe de filas Pedro Sánchez y así no se puede comprobar si goza de poder de convocatoria sin el presidente a su lado o la vicepresidenta María Jesús Montero, como es habitual. Así que amparándose en el bonito paisaje, el líder socialista lanza consignas prácticamente en 'solitario' y a los suyos, que deberían estar convencidos.
El próximo 9 de junio se medirá el respaldo ciudadano a estas dos candidaturas, pero también será el cuarto duelo en las urnas entre Moreno y Espadas. Los tres anteriores los ha ganado el 'popular', mientras que el socialista pierde representantes cita tras cita, porque los andaluces se identifican cada vez más con un PP andaluz que reclama el protagonismo de Andalucía en España y en Europa, mientras el PSOE se pliega a las directrices del más puro 'sanchismo' y ha perdido su identidad.