El homenaje a Susana Díaz evidencia la grieta en el PSOE-A y que está "descabezado"

El homenaje del Ayuntamiento de Sevilla a la expresidenta de la Junta y senadora Susana Díaz ha causado un fuerte rifirrafe entre las filas socialistas y ha evidenciado la grieta en la federación andaluza que sigue opinando a favor y en contra sobre aceptar por parte de Díaz el título de Hija Predilecta de Triana, el barrio sevillano donde vive, por nacer la propuesta de un gobierno del PP.

Las críticas más feroces, como les adelantamos en ESdiario, llegan del presidente del PSOE-A Manuel Pezzi, que por segunda vez en escasos días afea a Susana Díaz que quienes la reconocen como Hija Predilecta de Triana --en referencia al equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Sevilla-- "nos están acusando a todos de ladrones, a ti también, como socialista".

En un comentario en su cuenta en la red social 'X' el presidente del PSOE-A ha insistido así en cuestionar la decisión de Susana Díaz de aceptar ese reconocimiento que llega con motivo de la Velá de dicho barrio que se celebra este mes de julio, según anunciaba el pasado viernes el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz. Pezzi echa más leña al asunto como hizo por la misma vía este pasado fin de semana, cuando comentó que él "renunciaría" a dicha distinción de haber sido él quien la hubiera recibido.

La tensión crece y sobre el comentario le han preguntado al secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, quien ha evitado entrar en "polémica" e intenta aplacar los ánimos asegurando que le parece "muy bien" el reconocimiento a Díaz porque "ejerce" como vecina del barrio.

El expresidente De la Borbolla: "Miserable"

Sin embargo, el que no ha evitado intervenir ha sido el expresidente andaluz, José Rodríguez de la Borbolla, que ha calificado las palabras del presidente socialista andaluz de "miserables con una persona que ha sido presidenta de la Junta de Andalucía y una grave falta de respeto con las instituciones democráticas como el Ayuntamiento de Sevilla".

Rodríguez de la Borbolla que en los últimos tiempos ha sido muy crítico con Pedro Sánchez y sus medidas, como la ley de amnistía, así como con la cúpula del PSOE-A, ha señalado que esta polémica es un reflejo de la situación actual de la dirección del PSOE-A: "Está descabezado. Le falta cabeza para analizar la realidad actual, para definir una estrategia o para dirigir un colectivo. Está desorientado". A ello el expresidente ha apuntado que estas declaraciones "revelan una manera" de estar en política "poco respetuosa con las personas y con las instituciones".