La causa del incendio en el que murió una familia responde a un acto habitual en cualquier hogar
El fallecimiento de los cuatro miembros de una misma familia, un matrimonio y sus dos hijos, en la localidad sevillana de Guillena impacta aún más tras conocer cómo se originó el fuego.
Los féretros de la familia fallecida en un incendio de Guillena, Sevilla.
El trágico suceso que tuvo lugar el pasado domingo por la mañana en la localidad de Guillena, Sevilla, ha conmocionado a los vecinos del municipio, que este lunes acudían de manera multitudinaria al entierro de los cuatro miembros de una misma familia, un matrimonio y sus dos hijos de 20 y 16 años, que fallecieron por un incendio en su vivienda.
Imagen de la vivienda en Guillena donde se ha producido el incendio en la que han fallecido cuatro personas.
El dolor desgarra a los vecinos, ya que era una familia muy conocida y querida con la que se ha cebado la mala suerte. Y es que entre las informaciones que se han conocido sobre el suceso destaca que las llamas se produjeron en la planta baja de la vivienda mientras la familia dormía en la planta superior, pero no pudieron salir del inmueble debido a que había rejas en las ventanas y la puerta de acceso a la azotea estaba cerrada con llave. Unas medidas de seguridad que son habituales en muchas casas del pueblo y del resto de España, pero que pueden convertirse en una trampa mortal.
Andalucía
El pueblo sevillano de Gillena llora la muerte de los cuatro miembros de una familia en un incendio
Manuela Herreros
Un móvil cargando apoyado en el sofá
Pero aún más alarmante es el motivo por el que se ha originado el incendio, ya que constituye una practica habitual en cualquier hogar. Según releva la investigación de la Guardia Civil, un teléfono móvil enchufado a la red que estaba encima de un sofá ha sido la causa del fuego. Así concluye su informe el equipo de incendios de la Benemérita, que atribuye la causa del incendio ha sido la explosión y combustión de la batería de un móvil (y no de un patinete como trascendió en un primer momento) que estaba cargando en la parte inferior de la vivienda.
Un gesto que cualquiera lleva a cabo en diario en su casa y que en ningún caso hace pensar que pueda acabar en una tragedia de tal magnitud como la vivida en esta localidad de Sevilla.