España compra más naranjas de Egipto y bonifica a países con plagas
La Unió de Llauradors alerta sobre la caída de los precios autóctonos amenazados también por las plagas importadas y pide eliminar las bonificaciones de las tasas portuarias
La Unió Llauradora i Ramadera denuncia que los puertos de Castellón y Valencia, Gandia y Port de Sagunt bonifican las tasas portuarias de los cítricos importados de terceros países, concretamente el primero con un 40% y un 30% el segundo.
También bonifican esas tasas los puertos de Huelva (40% en mercancía), Tarragona (30% en barco y 35% en mercancía a partir de 30.000 toneladas), Cartagena (15% en barco) y Las Palmas (20% en mercancía).
LA UNIÓ ha dirigido un escrito a las respectivas presidencias y Consejos de Administración de los puertos expresando preocupación por esas bonificaciones, "especialmente cuando provienen de países con presencia de plagas y enfermedades de cuarentena no presentes en la Unión Europea que podrían ser letales en caso de entrada para los cítricos valencianos y españoles".
El secretario general de LA UNIÓ, Carles Peris, ha pedido a los puertos que revoquen las bonificaciones de las tasas portuarias a los cítricos procedentes de países con presencia de plagas o enfermedades de cuarentena, como medida para "contribuir a preservar la salud vegetal de las plantaciones de cítricos y garantizar la seguridad alimentaria de los ciudadanos". Peris advierte de que "si no se eliminan estas bonificaciones, LA UNIÓ realizará acciones de protesta durante los próximos meses en los recintos portuarios".
LA UNIÓ pone el ejemplo de Egipto que actualmente está en campaña de exportación de cítricos a la Unión Europea y que puede acceder a través de los puertos con bonificaciones. Este país tiene la presencia del hongo Phyllosticta citricarpa, detectado en puertos de la Unión Europea el pasado mes de julio. Además, Egipto ha tenido en 2023 un total de 81 alertas sanitarias, mientras que en 2022 tuvo 42 y, específicamente en el caso de cítricos, en 2023 ha tenido 32 alertas, frente a las 17 que tuvo en 2022.
Otro caso preocupante es el de Sudáfrica, que además del hongo Phyllosticta citricarpa, tiene la presencia de la falsa polilla Thaumatotibia leucotreta. Hasta noviembre de 2023, la Unión Europea registró 56 intercepciones de este país con la presencia de alguna plaga, mientras que en 2022 tuvo 33 intercepciones.
Desde el sindicato de agricultores exponen que estos datos revelan la necesidad de extremar las precauciones para evitar la entrada de plagas que podrían tener consecuencias devastadoras para nuestras plantaciones. "Es imprescindible alinear los intereses de los puertos valencianos con los intereses de los sectores económicos de la Comunitat Valenciana y este no es el caso porque se obvia al sector agrario", ha defendido el secretario de LA UNIÓ.
Más naranjas de Egipto
Paralelamente, a estas acciones ante los puertos, LA UNIÓ ha remitido un escrito al ministro de Agricultura, Luis Planas, en la que traslada su preocupación por el incremento significativo de las importaciones de cítricos, principalmente naranjas, procedentes de Egipto.
Por ello le insta a que “desde el Gobierno de España se incrementen los controles e inspecciones en los puertos españoles, con especial atención a los puertos de Castellón y Valencia, sobre las importaciones de cítricos procedentes de Egipto”.
Las importaciones de cítricos egipcios han experimentado un alarmante aumento desde 2014, alcanzando cifras récord en 2023 con un total de 487.753 toneladas importadas (enero-septiembre). Este incremento del 109,1% respecto al año anterior y del 84% en comparación con la media de los cinco años anteriores es motivo de gran inquietud para los agricultores españoles que se dedican a la producción de variedades de naranjas.
En la carta dirigida al conseller valenciano de Agricultura, José Luis Aguirre, LA UNIÓ le ha solicitado un incremento de las inspecciones y controles en los almacenes de las empresas citrícolas importadoras de la Comunitat Valenciana para evitar, por un lado, la presencia en estos cítricos importados de cualquier plaga o enfermedad y, por otro, para evitar el reenvío con una etiqueta de procedencia de la fruta que no se corresponda con la realidad.
La organización lamenta que este escenario plantea un problema evidente para los agricultores valencianos y españoles, quienes "podrían ver disminuidos los precios de sus productos o, en el peor de los casos, enfrentarse a la imposibilidad de vender sus cosechas debido a un aumento no justificado de la competencia".