Rubén Rondón, de dormir en el suelo a triunfar en el ring y en las pasarelas
El joven de Valladolid tiene una prometedor futuro en las grandes ligas de las artes marciales mixtas y compagina su duro deporte con ser modelo, la publicidad o actor de series y películas.
A muchos no le sonará su nombre, pero será por poco tiempo porque el joven tiene por delante un futuro prometedor. Rubén Rondón, conocido en el mundillo como Rubenthai , tiene un palmaré deportivo absolutamente envidiable: 6 veces campeón de España de Muay Thai Kickboxing, K-1 y MMA y dos veces campeón mundial. El pasado 18 de marzo, se coronó como campeón internacional, obteniendo el cinturón WKN en K-1 con guantillas en el prestigioso evento internacional Hombres de Honor.
Igualmente es miembro de la Selección Española de Kickboxing y Muay Thai (2019) y desde 2021 de la Selección Española de MMA. Por todo ello, es deportista de Alto Nivel por el Consejo Superior de Deportes (CSD).
Como modelo tiene también una excelente proyección, trabaja con varias agencias, ha protagonizado anuncios de grandes marcas y participa en varios programas de televisión. También es actor y estudia interpretación, algo que le ha hecho participar con pequeños papeles tanto en series de televisión como en varias películas.
Rubén Rondón, con 22 años, no lo ha tenido fácil. En una reciente entrevista en COPE el joven se sinceraba con los oyentes. Nacido y criado en un conflictivo barrio de Valladolid, Rubenthai creció entre los golpes que le dieron en el colegio y la calle en un ambiente de droga. Su padre le echó de casa ya siendo menor y se fue con lo puesto a Guadalajara para ser campeón del mundo de artes marciales cuando solo era amateur, en ese tiempo dormía en el suelo.
El divorcio de sus padres le ha marcado: “Me afectó pero fue más tarde, con 16 o 17 años. Cuando era más pequeño no me enteraba. Yo aprendí artes marciales por defenderme y por las películas, me encantaban las de artes marciales como Karate Kid. El muay thai no es kárate sino arte marcial y deporte de contacto, de los más duros que existen, se puede golpear con todo. Lo elegí porque quería ser el más duro, pero empecé con kárate antes porque era más suave, no había tanto contacto. Aquí entrenamos para el combate”, decía a los oyentes de Fin de Semana de COPE.
Rubén Rondón reconocía a Cristina López Schlichting que tiene una “furia dentro”, debido a los “problemas que he tenido anteriormente, los que tengo a diario también, entrenando se me quita mucha ansiedad. Me permite sacar cosas que llevo dentro para desahogarme, por eso peleo cada poco tiempo, para sentirme mejor. Todo el mundo debería practicarlo de hecho”.
Rubén Rondón y su madre, Yolanda
Rubén prometió a su madre Yolanda García que, cuando él tuviera dinero, le compraría una casa: “Se lo dije y se echó a llorar. Va muy bien la cosa, en unos años lo consigo cien por cien seguro, y el otro día estuve con ella en otra entrevista, se lo dije y ella también está segura”.
También tiene buenos consejos para jóvenes que se encuentran como él, haciendo frente al acoso escolar y con un potencial por descubrir: “Que sigan luchando por lo que quieren, los problemas están por algo y si los superan van a llegar a más. Si se estancan no van a ser nadie, ellos deciden”.
Además, Rubén Rondón da clases de Muay Thai en el gimnasio All for Box de Pinar de Chamartín, todo eso hasta que cumpla su sueño: “llegar a lo más alto, las ligas grandes, y ser el número 1 para ayudar a mi madre. Me gusta superarme hasta que me dé el cuerpo, a mí me quedan unos 10 años, luego seguiré con la moda y otros proyectos que tengo”.
Su vida ahora está entre las cámaras y unos duros entrenamientos con mucho control, lógicamente, de su dieta. Un sacrificio que se hace más llevadero con su nutricionista, Marco Climent, de Midietic.