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Piden a la Junta y al Ministerio un plan biosanitario para la lucha contra la EHE

El Sindicato de Veterinarios de León, Sivele-Uscal, reclama que establezcan un plan biosanitario y un plan de vacunación gratuito para la lucha contra la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica

Ganado vacuno.SIVELE

Publicado por
ESdiario / Agencias
Valladolid

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El Sindicato de Veterinarios de León, Sivele-Uscal, ha reclamado a la Junta de Castilla y León y al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que establezca un plan biosanitario y un plan de vacunación gratuito para la lucha contra la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE).

Así lo ha pedido en un comunicado en el que ha advertido de que la provincia de León es la más afectada de la Comunidad por esta infección con 133 casos de EHE registrados en 12 municipios, además de 1.825 animales sensibles a esta enfermedad.

La enfermedad hemorrágica epizoótica nunca había sido detectada en España, ni en Europa, hasta el pasado 10 de noviembre de 2022, cuando las autoridades italianas comunicaron la detección del virus en explotaciones de ganado bovino en la isla de Cerdeña. El 18 de noviembre de 2022 se detectaron los primeros casos por el serotipo 8 en el sur de España.

Se trata de una enfermedad vírica infecciosa no contagiosa que se transmite por mosquitos del género Culicoides, que tiene muchas características morfológicas y estructurales en común con el virus de la lengua azul, y afecta a rumiantes domésticos y salvajes.

En el ganado vacuno, aunque suele cursar con una clínica moderada y autolimitante, en algunos casos puede originar cuadros más graves, con fiebre, lesiones de la mucosa bucal, cojeras, inflamación del rodete coronario, inflamación de la lengua, diarrea hemorrágica o abortos, pudiendo llegar a provocar secuelas y, en menor medida, la muerte de los animales.

Por su parte, el ganado ovino es susceptible a la infección, pero poco a la enfermedad clínica, y el caprino es muy poco susceptible a la infección, mientras también pueden verse afectados animales silvestres como los ciervos, gamos y corzos, por lo que es obligatorio para los ganaderos comunicar inmediatamente cualquier sospecha que permita adoptar medidas de desinsectación en animales e instalaciones como sistema de prevención.

Los ganaderos afectados por su parte deben seguir una serie de recomendaciones entre las que se encuentra la supervisión diaria de los animales, especialmente en los sistemas de producción extensivos, la atención temprana a los miembros afectados, que asegure su estancia en lugares sombreados y confortables, así como la disponibilidad diaria de agua y alimentación para evitar que pierdan su condición corporal.

En este contexto, Sivele ha recordado que desde el pasado mes de julio se dispone de la primera vacuna autorizada temporalmente por el procedimiento de emergencia frente al serotipo 8 del virus, y que se trata de una vacuna inactivada, que cumple con las condiciones de seguridad y eficacia exigidas, de la que ya se han producido en una fase inicial dos millones de dosis, y cuya aplicación es voluntaria por parte del ganadero.

Esta vacuna puede suponer una herramienta para evitar las pérdidas directas y facilitará el movimiento de animales susceptibles, ya que se espera que en el último trimestre de este año se modifique la legislación facilitando el movimiento de los animales que hayan sido vacunados.