Lo más íntimo que tienen Nuria Roca y su marido, expuesto a la vista de todos
Está claro que son uno de los matrimonio más particulares y también más mediáticos de la pequeña pantalla española. Será por eso, y porque la confianza ya se sabe, que han dado este paso.
El matrimonio formado por Nuria Roca y Juan del Val constituye además uno de los dúos más divertidos y mediáticos de las televisión.
Y es que al margen del éxito de su tertulia en El Hormiguero de Pablo Motos, la pareja, que el pasado 6 de octubre celebró sus 20 años de matrimonio, suele presumir activamente a través de sus redes sociales de la bonita vida familiar que tienen junto a sus tres hijos: Juan, Pau y Olivia.
Así y aunque han compartido con sus fieles seguidores muchos de los aspectos más íntimos de su vida privada, ambos se resistían a mostrar lo más privado de todo. Hasta ahora.
Y es que tras un debate interno al que la presentadora hizo frente y tras reflexionar acerca de ello, optó por hacer las delicias de sus seguidores al considerar que ya existe ''confianza suficiente'' entre su comunidad de fans y se animó a enseñar uno de los rincones más especiales de su casa.
''Tengo una butaca en mi habitación donde me siento, respiro hondo, me relajo, estudio, leo, veo la tele, hablo por teléfono… y cuando entra esta luz por la ventana todo se para...'', ha escrito la colaboradora de televisión junto a la imagen en la que muestra cómo el matrimonio tiene decorado su lugar más personal, su dormitorio.
Un límite que en un principio no quería traspasar y quiso justificar por qué: ''Es para mí lo más íntimo que tenemos, nuestro lugar, donde somos de verdad, donde transcurre nuestra vida. Pero, si os parece, os iré mostrando rincones que os darán buena cuenta de ella. Creo que ya tenemos la confianza suficiente por aquí para que os abra la puerta y os invite a un café en casa''.
En la fotografía, pese a que no se vislumbra la butaca, sí se pueden apreciar los cuadros que tienen colgados, que recogen muchos de sus recuerdos juntos, con los que le dan un toque íntimo a su dormitorio.