Don Juan Carlos ya no se esconde: penúltimo feo a la Reina Sofía
No es la primera vez que da la "campanada" en Nochevieja pero el Rey emérito ya ni siquiera guarda las apariencias. Disfruta de su libertad sin ataduras y a todo tren para evitar tensiones.
Juan Carlos I suele poner tierra de por medio en Navidades para evitar encuentros incómodos.
Agridulce 78 cumpleaños el de este martes para el Rey emérito, en el que los preparativos para sentar a su hija mediana en el banquillo de los acusados copaban todos los titulares de los medios. Sobre todo ahora que se ha sabido que la Infanta Cristina, acusada como cooperadora necesaria de dos delitos fiscales cometidos por su marido, Iñaki Urdangarin, se sentará en un extremo de la última de las tres filas que ocuparán los 18 acusados, en un rincón que, por la ubicación decidida, estará justo frente a la zona asignada a la prensa. Lo que le faltaba.
Menos mal que Don Juan Carlos está disfrutando de su libertad de "jubilado" ya sin necesidad de guardar las apariencias, ni siquiera en Navidad. Y es que el padre de Felipe VI, según recoge La Otra Crónica, ha cogido la costumbre de poner tierra de por medio cada vez que se avecinan celebraciones familiares que, entre otras cosas, "le obligarían a compartir mesa y mental con la Reina Sofía".
Así, el Monarca emérito ha puesto pies en polvorosa por segundo año consecutivo estas fiestas y ha recibido el Año Nuevo en Los Ángeles sin esconderse demasiado. De hecho el día 1 de enero se dejó ver en el lujoso hotel de cinco estrellas Beverly Wilshire, de la cadena Four Seasons, cercano a la playa de Venice, donde el precio por habitación es de 823 euros la noche, ascendiendo a 1.200 euros si se elige una suite. Escenario de la mítica Pretty Woman, cuenta con prestigiosos restaurantes como El Cut o el Blud donde además se puede elegir entre los mejores vinos del mundo, ideal para un apasionado de la enología como el Monarca.
Don Juan Carlos no sólo no se ocultó sino que saludó a todo el que le reconocía y hasta se hizo fotos con un famoso periodista argentino, Jorge Rial, que se alojaba allí con su novia, Agustina Kampfer, y sus dos hijas.
Cabe recordar que el año pasado, el Rey generó la polémica en Nochevieja al salir a la luz una foto suya en uno de los restaurantes favoritos de los famosos en Hollywood, The Ivi, donde fue a almorzar con unos amigos en vísperas de Año Nuevo.