Monumental bronca entre Rosa Benito y Chayo Mohedano a costa de Sálvame
La colaboradora afronta su última semana en el programa de Telecinco. Pero parece que sus decisiones no están sentando demasiado bien al resto de la familia.
Rosario Mohedano está muy molesta. No entiende por qué es víctima de una caza de brujas que persigue acabar con ella. Se rebela en la intimidad, aunque en público también empieza a mostrar su desilusión y desesperación. Aunque advierte que ya no juega con las cartas marcadas, lo cierto es que todos sus pasos parecen fruto de una burda estrategia que puede afectar a toda la familia. Y es que Rosa afronta su última semana en Sálvame. El próximo 1 de julio, la ex peluquera tendrá que abandonar el programa que le encumbró a la fama. Las querellas que el marido de su hija interpuso contra Telecinco y La Fábrica de la Tele han provocado su salida inminente de la Corrala Show. Pero Rosano actúa con la libertad que quisiera. Está entre dos aguas.
Advierten a este periódico que la última conversación telefónica entre Chayo y Rosa acabó en gritos y llantos. Parece que Rosa no acepta que su hija siga intentando batallar en contra de la productora que, durante tantos años, les ha permitido hacer frente a deudas y miserias. Benito maldice el día en que decidió bajarse del barco televisivo para arrastrar el tacón por las fiestas populares. Fue el inicio de un ocaso que ahora puede dejarle temblando y con infinidad de gastos a los que hacer frente.
ESchismógrafo ha podido saber que la oferta que Sálvame le hizo no fue aceptada por Rosa. Al parecer, el programa quería seguir contando con ella una vez a la semana, lo que no convenció a la contertuliana. Una decisión poco acertada, quizás ingrata, pues Sálvame ha sido su salvavidas en más de una ocasión.