Rosario Mohedano desafía a sus haters con una decisión que podría cambiarle

Rosario Mohedano es indiscutiblemente artista. A pesar de que, durante años, ha sido carnaza de los programas de televisión, la hija de Amador Mohedano y Rosa Benito desaceleró televisivamente para centrarse en sus proyectos como cantante.

Lo hace con paso discreto pero firme. Actúa en verbenas y fiestas patronales pero sus actuaciones siempre tienen una respuesta positiva del público que, sin duda, ovaciona al término del recital. Es el mejor premio, y más ahora que su nombre -como siempre- aparece envuelto en un lazo de polémica. Tan segura está de sus capacidades que el pasado sábado compartió con sus seguidores una fotografía en la sede de la SGAE donde acudió para registrar dos nuevas canciones que, en caso de triunfar, podrían repercutirle grandes beneficios económicos. Y es que, al parecer, Chayo también compone sus propias canciones ante el despiporre de sus haters que le atizan indiscriminadamente.

Sin embargo, ella mira al frente con tranquilidad y aplomo. Aunque las querellas interpuestas por su marido contra el programa y los responsables del mismo en el que trabajaba su madre haya sido catalogado por algunos como un acto suicida, a Rosario no le tiembla el pulso al argumentar su venganza. Insiste en que ha sido víctima de incontables comentarios hirientes que han conseguido perjudicar su trayectoria como cantante. Una realidad alterada con el fin de ganar la batalla judicial. Porque, además de los azotes públicos recibidos, Rosario y su familia han llenado sus arcas participando del show. Porque Mohedano no sólo ha acudido a realitys de convivencia sino que, además, ha formado parte como colaboradora de espacios de crónica social.