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Isabel Pantoja da forma a una orquestada venganza contra Dulce

La tonadillera ha decidido zanjar ciertos asuntos. Hacer borrón y cuenta nueva desde el reducto de paz en el que se ha convertido Cantora para ella. Saldrá de él para visitar los juzgados.

Chabelita teme el enfrentamiento de su madre con Dulce

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De nada parecen haber servido los últimos arrumacos entre Chabelita y su madre. Después de que la hermana de Kiko Rivera intentase templar la tensa situación que ha vivido con mamá Isabel en los últimos meses, la Pantoja ha decidido seguir con sus deseos y ajustar cuentas con quién ella cree que debe hacerlo.

Sonados han sido los enfados entre Isabel y Chabelita a cuenta de Dulce, pero la eterna viuda de Francisco Rivera Paquirri tiene bien clara su intención de no dejar que se sigan aprovechando de su fama y de su nombre.

La hermana de Kiko Rivera puede que no se pronuncie, fiel a su intención de mantener un perfil bajo para acrecentar los cero s de la exclusiva de su boda con Alejandro. Dicen sus cercanos que no seguirá defendiendo a Dulce en público en los enfrentamientos que ésta mantiene con su madre. Y para demostrarlo no ha dudado en publicar un post en su blog sobre los cuidados y los mimos que Isabel le da en Cantora. Algo que no era así desde hace tiempo y con lo que parece, poco a poco, posicionarse.

Enfrentamiento legal

Y mientras Isabel sigue con su guerra con Dulce. De hecho, el próximo septiembre podría verse las caras en los juzgados con la enemiga de Mila Ximénez; un mes que, junto con las diferencias legales entre Toño Sanchís y Belén Esteban, parece venir cargado de asuntos legales.

Así que la madre de Kiko Rivera regresará a los juzgados para luchar contra Dulce. Aconsejada por su hermano Agustín, Isabel ha puesto una denuncia por las declaraciones de la niñera en su paso por el programa Supervivientes.

Según la cantante esos comentarios vulnerarían sus derechos. Sobre todo en lo referente a un artículo de la Ley de intromisión al Honor y a la Intimidad en el que se considera delito que los empleados domésticos cuenten lo que sucede en el hogar en el que trabajan.