Toño Sanchís sienta las bases para cavar la tumba mediática de Belén Esteban
El que fuera manager de la madre de Andreíta está allanando el terreno para alzarse como la nueva estrella mediática de Telecinco. Pero, para ello, tiene que acabar con gente muy importante.
Telecinco sigue adelante preparando el que, espera, sea uno de los grandes estrenos de 2017. De esos que, gracias a una audiencia elevada, le permita resarcirse de los malos resultados que está cosechando en la última entrega de Gran Hermano.
Así que la cadena está poniendo toda la carne en el asador para que Gran Hermano VIP vuelva a ser clave en la parrilla. Y, para ello, no dejan de barajar con qué caras conocidas se asentará la audiencia.
Suenan nombres como el de Aramis Fuster, Alba Carrillo o José Manuel Parada. Pero, sobre todo, el que parece que más interés genera es el de Toño Sanchís. La guerra contra la Esteban también tiene sus ventajas. Y él lo sabe.
El que fuera manager de Belén Esteban, y lo sigue siendo de Olvido Hormigos, estaría intentando sentar las bases para su participación en el reality. Unas condiciones contractuales que podrían ser el final de los compañeros de la madre de Andreíta.
Y es que, además de cobrar unos 20.000 euros por semana de concurso (un caché muy alejado del que cobró la Esteban por lo mismo), se rumorea que Toño habría pedido no coincidir con ningún colaborador de Sálvame dentro de la casa. Pero no sólo eso, sino que Sanchís querría que ningún compañero de Jorge Javier estuviera en los debates que se generan en la cadena en torno a Gran Hermano.
Es decir, que si Telecinco cede a estas exigencias, ni Kiko Hernández, ni Matamoros, Lydia Lozano o la misma Belén Esteban, podrían estar cerca de Sanchís en su presunto paso por Guadalix. Algo que ya está desatando los odios de los afectados.