Fernández Tapias y Nuria, en shock, tras el brutal accidente de su sobrino
El empresario y su mujer, Nuria, están desolados por el terrible accidente que le ha costado la vida a Jaime, hijo de un empresario taurino y nieto de la exdiputada del PP por Palencia.
Fernández Tapias y Nuria González, destrozados ante el brutal accidente de su sobrino Jaime.
Son incapaces de asimilar la noticia. Fernando Fernández Tapias y su mujer Nuria González, están destrozados. Tan solo tenía 21 años y su sobrino, Jaime González de Pablos junto a su amigo Víctor Prieto, de 22 años, perdían la vida al ser arrollados por un tren. El suceso tuvo lugar en la localidad palentina de Monzón de Campos y se están investigando las causas del terrible y dramático accidente, según ha informado El Norte de Castilla.
Al parecer, los dos jóvenes fueron embestidos por un tren Alvia 4193 que cubría el trayecto entre Madrid y Santander mientras cruzaban en coche un paso a nivel situado en la P-991. El sobrino del empresario iba con su amigo a la localidad palentina de Husillos donde tenían una cena, según publica el citado diario.
Jaime era músico y vivía en Venta de Baños. Su padre es el conocido empresario taurino José María González Sánchez y su abuela es la exdiputada del PP por Palencia, Celinda Sánchez.
Las familias están rotas de dolor. Nuria está muy preocupada por su marido, Fefé está muy delicado de salud y esta tragedia familiar es un golpe terrible para el empresario.
El sobrino del empresario y su amigo eran arrollados por un tren al cruzar un paso a nivel. Se están investigando las causas
La Guardia Civil está investigando ahora los motivos que les llevaron a rebasar el cruce en el instante en que se aproximaba el tren con 90 pasajeros a bordo. Al parecer, las semibarreras del paso a nivel funcionaban correctamente tras el impacto.
Según la última hora, el jefe provincial de Tráfico de Palencia, Fernando Alonso ha señalado que una de las hipótesis con las que se trabaja es que los jóvenes pudieron sortear la primera de las semibarreras del paso a nivel con la intención de continuar su marcha, impactando el convoy en el medio del cruce.
La impactante imagen muestra el estado en que quedaba el coche de los jóvenes que se convertía en un amasijo de hierros tras el accidente. Al parecer, el tren arrollaba al vehículo por el lado delantero del conductor y lo arrastraba por la vía del tren unos cincuenta metros. Los cuerpos de los dos chicos eran despedidos del coche a varios metros de distancia.
Fueron momentos muy angustiosos y dramáticos, durante el traslado de los pasajeros del tren, una mujer gritaba destrozada: "¡Otra vez no, otra vez no!". Unas palabras que dan mucho que pensar. Las investigaciones para esclarecer el trágico suceso siguen abiertas.