Más leña para Telecinco: Aída Nizar envuelta en un robo millonario y agresión
La concursante del reality insultó y amenazó a la recepcionista de un hotel en Sierra Nevada a la que acusó de "ladrona" tras denunciar un cuantioso robo de la caja. Lío para Mediaset.
Como si fuera parte de un guión, y horas antes del debate televisivo de los domingos -el primero en el que Aida Nizar asistirá una vez fuera de la casa tras su expulsión de Gran Hermano VIP del pasado jueves- cuenta Granada Digital que Nizar ha sido denunciada por amenazar de muerte a una recepcionista del hotel Ziryab, sito en la estación de esquí de Sierra Nevada, concretamente en Padrollano, donde Aída Nízar, a su vez, denunció el pasado enero el robo de una gran cantidad de dinero de la caja fuerte de la habitación de este hotel en el que se hospedaba.
Cuenta la mencionada información que la famosa tertuliana aseguró que la caja fuerte de su habitación había sido forzada y le habían robado 174.000 euros. Se apresuró hasta la recepción del hotel para informar de lo sucedido y se dio parte a la Guardia Civil pero allí, entró dentro del puesto de recepción y comenzó a “golpear y dar manotazos” a la recepcionista, a la que le dijo “con alto tono de voz” que “ella estaba compinchada, que era una ladrona”, según se recoge en la denuncia.
La denuncia recoge que Aída dio patadas a la recepcionista y la amenazó: "hija de puta, te voy a matar"
Según las diligencias de la Guardia Civil, tanto del relato de los hechos del propio cuerpo de seguridad, como de la denuncia interpuesta por la recepcionista, a las que ha tenido acceso Granada Digital, Aída Nízar amenazó de muerte a la recepcionista, a la que también agredió con “patadas en las piernas”. Le dijo que era “una hija de puta”, que la iba “a matar” y le iba “a abrir la cabeza”. Minutos después, la tertuliana salió nuevamente a la recepción y comenzó a decirle a los clientes que los trabajadores del hotel eran “unos ladrones” y que “no dejaran nada en las habitaciones” porque se lo iban “a robar”, desacreditando así el buen nombre del hotel y personal del mismo.
Concluye el citado medio su información asegurando que los agentes de la Guardia Civil allí presentes se centraron en “aplacar la tensión existente y templar los nervios de Aída Nízar”, quien pedía que “saliera la persona autora de los hechos”, mientras acusaba a la empleada de recepción de “compinche del robo del dinero”.