Lo que "ha pillado" Isabel Preysler de la herencia de Miguel Boyer
Después de año y medio del fallecimiento del exministro, Ana, Laura y Miguel Boyer, acaban de conocer el incómodo legado que les ha dejado su padre. Su viuda también está en el testamento.
El testamento de Miguel Boyer ya ha visto la luz. Los tres hijos del exministro, Miguel, Laura y Ana, ya conocen lo que les ha correspondido de una herencia "ruinosa". Con el reparto, a partes iguales, como era la última voluntad de Boyer, ya han surgido las primeras discrepancias. La atención se centraba en su viuda, Isabel Preysler y el morbo de saber qué le había dejado su marido.
La reina de corazones no ha tardado en "sembrar la paz" y ha hecho sus primeras declaraciones en La Vanguardia : “A mi me parece bien todo lo que ellos digan pero, vamos, todo lo que se ha dicho son cosas inexactas y falsas”, decía en el estreno de la película San Ignacio de Loyola, desmintiendo así cualquier insinuación de que exista una mala relación entre ella y los hijos de Boyer.
Los hijos de Miguel Boyer reciben una herencia ruinosa en la que, su viuda, Isabel Preysler es la "menos perjudicada"
Los herederos de Boyer se han echado las manos a la cabeza, sólo reciben como legado deudas y gastos de gran cuantía. De hecho, algunos se plantean renunciar a la desastrosa herencia.
Al parecer, Isabel Preysler es la menos perjudicada, dispone del tercio de libre disposición. Además, se queda con un cuadro que representa a la madre de Miguel Boyer con su hermana y un perro. Un lienzo que los hijos mayores consideran que debería estar en la familia y no de ella.
Según publica LOC la herencia "son trastos viejos", tres coches antiguos y caros de mantener a Miguel, que también se lleva la extensa biblioteca de su padre, con unos 6.000 libros. Los demás volúmenes podrían ir a una fundación que llevaría el nombre de Miguel Boyer, algo con lo que no estarían de acuerdo los hijos mayores.
Por su parte, Laura se llevaría una escultura de Mariano Benlliure y libros de Historia o Economía. Pero lo peor son las deudas. Los hijos de Boyer tienen que asumir los gastos derivados de la muerte de su padre, adelantados por la viuda en su momento. También tienen que pagar el impuesto de sucesiones.
A partir de ahora, los tres hijos del ex ministro tienen 30 días para aceptar la herencia, mermada en los últimos años, ya que fuentes de la familia aseguran que la fortuna que había amasado Boyer era considerable. ¿Dónde ha ido a parar el presunto patrimonio de Miguel Boyer?
Los herederos están desconcertados, nunca imaginaron recibir un legado tan ruinoso. En el testamento no se incluyen propiedades, nada del chalet de Puerta de Hierro donde reside actualmente Isabel Preysler. Una casa valorada en 9 millones de euros y en la que ya está empadronado Mario Vargas Llosa.
Solo cuentas vacías y deudas a la fecha de su muerte. Su hijo Miguel, incluso, se quejaba de que Isabel no le había dado ningún objeto personal para conservar como recuerdo de su padre. Una herencia amarga y que dará mucho que hablar.