El Marqués de Griñón consigue que le sirvan a una copa de vino fuera de hora
El marqués de Griñón ha sido protagonista de un hecho insólito. Y es que no cesó hasta que le sirvieron una copa de vino a deshoras. Lo consiguió a base de apellidos y títulos nobiliarios.
El marqués de Griñón es un hombre de aquellos que parece nunca pierde la compostura. Sin embargo, alguna vez también se pone nervioso. Ocurrió hace unas semanas en un acto al que asistió relacionado con la moda. Carlos Falcó quería tomarse una copa de vino y así lo solicitó. Sin embargo, le advirtieron que se servían bebidas en horas concretas y que en ese momento no tocaba. Lejos de conformarse con la explicación, Falcó empezó a recitar su larga lista de apellidos y títulos nobiliarios diciendo que a ver si él, siendo quien era, no tenía derecho a tomarse un vinito. Los allí presentes no daban crédito. Increíble que todo un marqués echara mano de sus orígenes para satisfacer sus ganas de vino. Sin embargo, viendo que estaba muy enfadado, optaron por saltarse las reglas y satisfacer su deseo. Para entonces, muchos de los allí presentes ya estaban mirando lo que ocurría y se decidió cortar el espectáculo.
Carlos Falcó ha encontrado el amor en brazos de Esther Doña. A ambos les gustaría casarse y ya han dado el primer paso para oficializar su relación inscribiéndose en el registro como pareja de hecho. Lo de la boda va a esperar un poco ya que algunos de los familiares del marqués no ven con buenos ojos a su joven novia. Especialmente, Tamara, que duda de las intenciones de la modelo. Algo que ha provocado distanciamiento entre padre e hija. De hecho, ella no le acompañó en la presentación de su último libro, aseguran que para no posar en la foto con Esther.
Pero no solo de matrimonio tiene ganas el marqués de Griñón, también de tener hijos. Así lo ha manifestado en reiteradas ocasiones. Y es que Esther Doña le ha devuelto la ilusión y se siente rejuvenecido. A sus 80 años, Carlos está pletórico y defiende lo suyo con su novia a capa y espada. Le molesta sobremanera que digan que ella solo está con él por interés cuando se ha convertido en su compañera más fiel y le acompaña en la mayoría de sus tareas. Si se cumplen sus deseos de paternidad, este sería su sexto hijo. Se ha casado en tres ocasiones. La primera, con Jeannine Girod, con quien tuvo a Manuel y Sandra. A ella se le rompió el amor cuando en su horizonte apareció Carlos Mendoza, el fallecido presidente del Real Madrid. A Isabel Preysler la conoció a través de amigos. El matrimonio de la filipina con Julio hacía aguas debido a las infidelidades de él. Falcó se convirtió en su paño de lágrimas, amigo y confidente. Se casaron y fueron padres de Tamara. Lo suyo se lo llevó Miguel Boyer, una pasión arrebatadora que hizo que tanto Preysler como el que fuera ministro de economía rompieran sus respectivos matrimonios. La tercera esposa de Carlos ha sido Fátima de la Cierva, una mujer muy discreta que poco ha lucido el título de marquesa consorte. De esta unión nacieron Duarte y Aldara. No se sabe bien cuál es el motivo, pero el caso es que el marqués y Fátima firmaron su divorcio más de tres años después de que se hubiera producido la separación física.