Preocupación por el estado anímico de Terelu Campos

Terelu Campos atraviesa un mal momento. Aunque su libro, Frente al espejo, ha sido todo un éxito de ventas, no es suficiente. Hace ya tiempo que tocó fondo y no consigue remontar el vuelo. ¿Qué le ocurre a la presentadora? Los problemas económicos la han dejado muy tocada. De hecho, ha aceptado ofertas de trabajo que años atrás eran impensables, como su posado en Interviú o pasar unos días en la casa de GHVIP. Sin embargo, Hacienda le pisa los talones, debe 200.000 euros, imposible decir no. Por otro lado, aunque Las Campos fue muy bien recibido por la audiencia, algunos de los pasajes del reality no han sido de su agrado. Las críticas no le son ajenas y sufre.

La hija de María Teresa Campos fichó por la productora de Sálvame a cambio de no recibir la indemnización que un juez dictaminó contra la productora del espacio por intromisión en su derecho al honor. Le ofrecieron trabajo de colaboradora y promesas de que volvería a ejercer de presentadora. Sin embargo, no es ningún secreto que el formato de las tardes de Telecinco no va con ella. No lleva nada bien el hecho de que su vida sea objeto de escrutinio por parte de sus compañeros. Son muchas las veces en que se le han saltado las lágrimas en pantalla. Demasiada presión para una mujer que en tiempos estuvo muy protegida. Hablamos de los días en que su madre formaba parte de la casta de los intocables.

Hace años, Terelu era la encargada de sustituir a Jorge Javier Vázquez en el Deluxe. Sin embargo, el hecho de que se tomara un descanso en Telecinco, cuando no le tocaba, trastocó su mundo laboral. Intentó volver pero le dijeron que no era posible. Y así estuvo esperando hasta que le dieron el ok para su reincorporación. Para entonces su nombre había sido tachado de la lista de presentadores. Su lugar fue ocupado por María Patiño. Como siempre, María Teresa Campos se lo tomó fatal. Se dice que la comunicadora acorraló a María en sastrería y le dijo de todo. Ciertamente, estas actuaciones perjudican enormemente a Terelu, a quien persigue el sambenito de ser la cláusula que su madre impone en sus contratos laborales. En realidad, no lo necesita, pues como conductora lo hace fenomenal.

No es ningún secreto que Terelu Campos siempre ha tenido problemas de peso, es algo que ha heredado de su madre y que su hermana Carmen también sufre. Estar a régimen ha sido una constante en su vida. Fue una de las más devotas pacientes de la doctora Folch y su dieta de la alcachofa. Empezó a descuidarse cuando le fue diagnosticado el cáncer de mama. Los nervios hicieron que comiera más de lo debido y se dejó llevar. No puso freno hasta llegar al punto que confesó que era incapaz de mirarse al espejo porque su imagen no le gustaba.

Terelu ha expresado hace unos días que se levanta triste y con ganas de llorar. Las cosas no han salido como esperaba y la decepción y la tensión le han pasado factura. En su ánimo está buscar consejo profesional. En cuanto al amor, afirma que no tiene ganas de tener pareja. Su última ruptura sentimental le costó un mundo. Junto a ella, Kike Calleja, que ha confesado a sus íntimos estar enamoradísimo de la hija de María Teresa. Una pena que ella no se quite la venda negra que cubre sus ojos y disfrute de lo que le ofrece Kike.