Se cumplen los peores presagios de Isabel Pantoja
La tonadillera se lo temía, y así lo había comentado con sus más íntimos. Pues bien, ha acertado. Su hija ha vuelto a hacerlo. Se trata del mayor error de su vida y puede pagarlo muy caro.
Isabel Pantoja, muy decepcionada con su hija
Isabel Pantoja hubiera deseado equivocarse en relación a los peores presagios que auguraba sobre su hija. Ha intentado por activa y por pasiva que Isa reconduzca su camino y dome ese carácter donde prima el hacer lo que le sale de la peineta. Sin embargo, la joven no escucha consejos, ni que vengan de su madre. En este sentido, cuando sabe que la tonadillera quiere hablar con ella de estas cuestiones, desaparece o bien juega al despiste. Algo que pone de los nervios a la cantante.
Que Pantoja no estaba equivocada en cuanto a que la inconsciencia con que actúa su hija le pasaría factura se demostró esta semana. Isa se había comprometido a asistir a la fiesta que Lecturas organizó con motivo de su centenario. Sin embargo, muy en su estilo, no acudió. Algo que ha hecho enfadar mucho a Luis Pliego, director de la revista, quien no ha dudo en recordarle que no se muerde la mano de quien te da de comer. Y es que Isa vive de lo que saca de las exclusivas de la publicación rosa que, con gran acierto, dirige Pliego. Por tanto, tildarla de descerebrada no es exagerado dado el origen de sus ingresos.
Enterada Isabel Pantoja de lo sucedido, puso el grito en el cielo. Otra vez su hija dando que hablar por su irresponsabilidad. Aunque la tonadillera es partidaria de que debe buscar otras formas de subsistencia, censura su falta de profesionalidad. Lo cierto es que está desesperada porque Isa no se enmienda. Con los suyos, se desahoga y confiesa su preocupación por esta hija tan díscola y con escasa afición al trabajo y el compromiso. Mientras tanto, Chabelita continúa con su Living la vida loca.
Amiga de soltar pronto, Isa asegura que Alejandro Albalá ya es pasado y que su presente es Alberto Isla, con quien afirma ir poco a poco pero con paso firme. La realidad es que el contacto entre ellos jamás ha cesado. Se han visto en diferentes ocasiones para disgusto de sus madres. La de Isla ruega para que cese el embrujo que su ex nuera ejerce sobre su hijo. La de Isa borró de su lista de los afectos al padre de su nieto el día en que su niña le explicó ciertos episodios ocurridos durante la convivencia. Paradojas de la vida, es lo mismo que le ha achacado a Albalá. Estas cosas se cuentan donde procede y no se van dejando caer para sembrar la duda.