20 años después airean el terrible secreto del Rey Juan Carlos contra Urdangarin
La Infanta Cristina y su marido celebran sus dos décadas de matrimonio. Cuentan que lo celebrarán como si fuese el "último aniversario", pero mirado atrás conocemos algunos secretos...
Lo cuenta LOC, contra pronóstico, en Ginebra van a celebrar este miércoles, 4 de octubre, un aniversario muy especial, ya que se cumplen 20 años de la boda de Cristina de Borbón con el entonces jugador de balonmano Iñaki Urdangarin. Ese 4 de octubre de 1997, sábado, "Barcelona entera era una boda" como reflejó algún un titular. Hubo fiesta la víspera en las calles con conciertos de música y castillos de fuegos artificiales. Al día siguiente, tras la ceremonia en la catedral, a la que acudieron 1.500 invitados, los novios hicieron un recorrido en Rolls Royce que presenciaron unos 200.000 barceloneses vitoreando a la pareja y al resto de la Familia Real.
Una introducción para después contar lo que pensaba realmente del enlace, el padre, entonces Rey. Así, explica, a Don Juan Carlos, no le hizo ni pizca de gracia que su hija se casara con un jugador de balonmano del que además tenía preocupantes informaciones sobre su ambición y supuestos líos de faldas.
Intentó incluso impedir el compromiso, orquestando una campaña mediática con periodistas de su confianza, que frustró su hermana Pilar, al caer en la trampa de un periodista que le mintió asegurando que se había anunciado el compromiso. "Ah, ya lo han anunciado, pues sí, estamos encantados, es un chico estupendo". El tiempo parece haber dado la razón a Don Juan Carlos, quien actualmente mantiene una relación fría con su hija y nula con su yerno.
Al Rey no le hizo gracia que su hija se casara con un jugador de balonmano del que tenía informaciones sobre su ambición y líos de faldas
El artículo además revela que este mes de septiembre, Cristina de Borbón ha viajado dos días a Barcelona en secreto, como siempre ha hecho, e incluso cuando acudió a una reunión de trabajo en La Caixa entró por el parking para evitar curiosos. También se entrevistó con sus abogados del bufete Molins, acudió a su peluquería, Llongueras, a alisarse el pelo y visitó a su cuñada, Ana Urdangarin, uno de sus grandes apoyos, que vive en el barrio del Puxet. Con ella pasa largas temporadas la madre de Iñaki, Claire Liebaert, desde que se quedó viuda, así que la Infanta también pudo ver a su suegra, con la que estuvo el verano en Bidart.
El viernes, 8 de septiembre, regresó a su hogar suizo para pasar el fin de semana en familia y no dejar solo a Iñaki, su obsesión. A una hora y 25 minutos de vuelo de Barcelona y a dos de Madrid, Ginebra es una opción de futuro cada vez más consistente para la familia Borbón Urdangarin, incluso si al final, como parece probable, el ex duque de Palma ingresa en prisión, y cumple condena en un centro penitenciario español. Antes de que eso llegue, la familia celebrará los 20 años de casados como si fuera el último juntos, concluye la citada información.