Isabel Pantoja intentó amordazar a la madre de su yerno con una grave amenaza

Isabel Pantoja no lleva nada bien que se metan con sus hijos. El celo se extrema si se trata de Isa. Es a ella a quien más protege, en detrimento de Kiko, al que ve fuerte y encarrilado. Aunque la cantante ha asegurado por activa y por pasiva que no ve los programas rosas, lo cierto es que no se pierde uno. De ahí que esté enterada de todo lo que sobre ella y los suyos se comenta. Y mira que se han dicho cosas, pero con quien más airada está es con Paz Guerra, su todavía consuegra hasta que la Ley disuelva el matrimonio de su Isa y Alejandro, y lo está porque ha largado de la niña de sus ojos. ¡Hasta ahí podíamos llegar!

Ni el propio Albalá era consciente del odio que su suegra tiene a su madre. Se enteró durante los días que compartieron con ella en Ibiza. Ya entonces se hablaba de que la cantante había interpuesto una demanda contra Paz por hablar de Isa, quien no dudó en sacar el asunto en la isla. Así lo explicó Alejandro durante un polígrafo al que se sometió en Sábado Deluxe. Explicó que su suegra le advirtió de forma severa, y en un tono con cierto deje de amenaza, que si ganaba la demanda que había interpuesto, Paz tendría que pasarse la vida haciendo pedicuras para pagar la indemnización solicitada. Albalá solo pudo articular que si eso ocurría, él mismo ayudaría a su madre para que pudiera hacer frente al pago de la deuda. Paradojas de la vida, ni rastro de la demanda. Ningún medio ha tenido acceso a ella, ni tan solo a la primera hoja con el sello del juzgado que garantiza que ha sido presentada.

Chabelita no piensa buscar otro modus vivendi más allá de las exclusivas. De ahí que tras la ruptura con el que todavía es su marido, anunciara a golpe de talonario que ha retomado la relación con Alberto Isla. La pareja viajó a París y en estos días se les ha visto en El Rocío. No hay duda que Isa es de las que suelta pronto sin mirar atrás. Aunque se ha comentado que Albalá tiene intención de viajar al Reino Unido para cursar estudios de piloto, de momento, sigue disfrutando del ocio. Aunque ya se ha reconciliado con su madre y su hermana, viaja de norte a sur de la geografía española. Por su parte, se sabe que Chabelita ha visitado recientemente a su paciente mamá en Cantora. Se supone que le habrá dado alguna explicación sobre las novedades en su vida. No obstante, como son tantas, y se producen a una velocidad de vértigo, la cantante no entiende nada. Está decepcionada con su hija porque ve que no tiene intención alguna de volver a las aulas para adquirir unos conocimientos que le otorguen una profesión y también porque no cumple con los escasos compromisos profesionales que contrae, como ocurrió cuando no asistió a la fiesta del centenario de la revista Lecturas. Ojo, porque esta desaparición podría costarle no recibir ni un euro de su última exclusiva. Ya le lanzó un recadito el director de la publicación, Luis Pliego: “No se muerde la mano que te da de comer”. Tampoco está de acuerdo la artista con el hecho de que la responsabilidad de la crianza de su nieto, Alberto, recaiga mayormente en Dulce dada su gran vida social. En el fondo teme que a Alberto Isla un día se le crucen los cables y pida la custodia del niño.