El drama de Arantxa Sánchez Vicario: otra vez sola y arruinada
Parecía que la tenista llevaba una vida familiar estable en Miami. Allí se instaló hace algunos años tras un grave escándalo económico que salpicó a sus padres y hermanos. Todo se derrumbó.
Malos tiempos para Arantxa. Se repite su historia vital
La vida de Arantxa Sánchez Vicario ha vuelto a dar un giro inesperado. Otra vez el destino ha querido que la historia se repita. Si antaño tuvo problemas con sus padres y hermanos, dado que se oponían a la boda con Josep Santacana porque le consideraban un cazafortunas, el tiempo podría haberles dado la razón. Al menos es lo que se desprende de la información publicada por LOC.
Según la citada publicación, Santacana ha abandonado a Arantxa y le pide el divorcio y la custodia de los dos hijos que tienen en común. Según él, la tenista no estaría en condiciones psicológicas de ocuparse de Arantxa y Leo, de 9 y 7 años de edad respectivamente. A esto hay que añadir el hecho de que Josep ha sido el gestor del patrimonio de su mujer desde que se casaron.
Fuentes familiares han confirmado que Josep “se ha llevado absolutamente todos los bienes de su esposa, incluso los trofeos ganados por la mejor deportista española de la historia, y la ha dejado en la ruina más absoluta”. Se cumplen así los peores presagios de la familia de Arantxa que, en su día, quisieron que Santacana firmara unas capitulaciones matrimoniales donde la fortuna de la tenista quedaba a salvo. Sin embargo, él se negó y ella le apoyó.
Arantxa y Josep en los días felices de su relación
Cuando Josep Santacana entró en la vida de Arantxa, los Sánchez Vicario encargaron un informe a la archiconocida agencia de detectives Método 3. El resultado fue demoledor. Intentaron advertir a la tenista del peligro que corría pero se negó a escuchar. Tras celebrar la boda, la deportista puso al frente de sus finanzas a su ya marido. Según su familia, de los treinta millones de euros que entonces tenía, divididos en bienes inmuebles, depósitos en metálico e inversiones, actualmente no queda nada.
Desde el entorno de Josep Santacana han salido al paso de la polémica información para puntualizar que el matrimonio hace dos años que está separado. También han desmentido que él se haya llevado del domicilio conyugal bien alguno que no le correspondiera. Así lo han hecho saber las fuentes mencionadas a El País. Todo indica que el todavía marido de la tenista no piensa quedarse callado.
Esdiario ha podido confirmar que Arantxa está ilocalizable. Tiene el teléfono cerrado y, por tanto, imposible ponerse en contacto con ella. A pesar de la tristeza, sigue trabajando en el Metropolitan School of Miami como directora deportiva. Puesto que ocupa desde que se creara esta escuela en 2014, considerada solo apta para ciertos bolsillos. Por tanto, el sueldo que algunos afirman percibe, entre 3.000 y 4.000 euros mensuales, se antoja algo escaso dada la clase de institución de la que hablamos.