La "falta de respeto" de Màxim Huerta con Doña Letizia que asusta en Casa Real
Tanto pasado televisivo, tanto titular mediático, tanto tuit incontrolado... Ahora que el periodista y presentador es el ministro de Pedro Sánchez hay algunos gestos que levantan ampollas.
Ahora que el flamante ministro de Cultura y Deportes, Màxim Huerta, ha vuelto a primer plano mediático después de algunos años centrado en su labor como novelista empiezan a adquirir especial relevancia sus intervenciones televisivas y tuits del pasado.
Mucho se ha hablado de los tuits en los que hablaba de los "ministros" o de lo poco que le gusta y sabe del Deporte que ahora tiene que defender. Mucho se ha hablado también de sus declaraciones, bastante recientes, sobre sus dificultades para ligar y/o mantener relaciones sexuales.
Pero durante su etapa en Telecinco, hace ya unos cuantos de años, también fueron muy sonados sus desencuentros con la hoy Reina de España, doña Letizia Ortiz. Aún retumban por los pasillos de La Zarzuela las duras declaraciones que hizo, desplazado en Roma, sobre la entonces Princesa de Asturias, su frialdad y su presunto despotismo con su marido, hoy el Rey Felipe VI.
Fue en marzo de 2013, un día antes de la Misa Inaugural del Papa Francisco, los Príncipes de Asturias recibieron a la prensa en una recepción organizada en la embajada española. A la recepción asistió Màxim Huerta que aseguró entre otras que la Princesa estaba tensa, ausente, incómoda y fría, que no atendía, que iba separada del Príncipe y que no estuvieron juntos en ningún momento.
Más aún, en una conexión con El Programa de Ana Rosa que aún se recuerda, Huerta dejó a Doña Letizia de mandona, señalando que no estaba cómoda y resultaba evidente y que solo al final fue a encontrarse con su marido: "Fue a buscar al Príncipe y le dijo: "Me parece que esto está acabando, deberíamos salir ya, nos van a echar."
Aunque posteriormente limaron asperezas un año después en el Palacio Real durante una recepción de escritores, hay cierta inquietud por ver cómo será la relación y todas las miradas están puestas en el nuevo ministro de Cultura que, sin duda, tendrá que coincidir no pocas veces con la Reina.