Eyre le amarga la Navidad a la Reina Sofía al airear tres dramas en Zarzuela
La periodista le recuerda a la Reina Emérita tres grandes infelicidades durante su etapa en La Moncloa. Tres vivencias personales que retumbaron en Palacio.
Tres Navidades, tres duros momentos para la Reina Sofía. Ha sido la periodista Pilar Eyre la que ha sacado a la luz tres dramas personales que le tocaron vivir en La Zarzuela a la madre del Rey Felipe.
Según cuenta en su blog de la revista Lecturas Eyre, el primero de estos tragos se remonta a 1962. "Fueron unas fiestas tan tristes que Sofía cogió repentinamente un avión para ir al lado de su madre, en Atenas, se puso enferma y tuvo que ser intervenida de urgencia. La prensa dijo que seguramente fue un aborto. Empezaron a correr rumores de que la pareja se llevaba mal, hasta el punto de que el parlamento griego llegó a pedir que se devolvieran los nueve millones de dracmas que había entregado como dote, "ya que se van a divorciar".
El segundo trago, según Eyre, tuvo lugar en 1975. "Para su primera Navidad como reyes, adornaron la Zarzuela con un árbol gigantesco tan lleno de luces que se veía desde los aviones. Hasta entonces, habían celebrado las navidades en el desangelado Estoril, junto a sus suegros, que en ocasiones no les dirigían la palabra. Sofía se vengó de tantos desprecios no invitándolos, aunque sí se rodeó de ‘los griegos’, sus hermanos y sobrinos".
Y lel tercero hace referencia a la separación del Rey Juan Carlos. "Después se los llevó a todos en un avión DC9 de las fuerza aérea al valle de Arán. Ocuparon una planta entera del Hotel Montarto y tomaron las uvas en La Borda Lobató. Sofía y Juanito, ataviados deportivamente –muy guapos–, se besaron en los labios. No brindaron porque Juan Carlos dijo que eso era una mariconada. Y parecían felices. ¡Fue la última vez! Una semana más tarde la Reina se presentó inopinadamente en una cacería y sorprendió a don Juan Carlos con otra mujer. Ese día separaron camas y habitaciones. Y no volvieron a hacer vida marital. Nunca más".