La metamorfósis física y más de la novia de Froilán: giro de 180 grados en fotos
Ya empiezan a proliferar las especulaciones sobre lo que andará pensando su tío, tan atentos como están siempre el Rey y Doña Letizia a cualquier cosa pueda perjudicar la imagen de la Corona
Mar Torres, la novia de Froilán, lleva en el punto de mira desde que comenzó su relación con el sobrino del Rey Felipe. Y es que tras muchas idas y venidas, parece que la pareja ha decidido retomar su relación, por lo que ahora se dejan ver de lo más unidos mientras comparten estudios y tiempo de ocio junto a sus amigos.
Sin embargo, esta misteriosa joven nunca había dejar entrever mucho de su vida privada, más allá de lo que había cambiado su apariencia física en los pocos años que lleva siendo conocida. Tanto, que hay quienes afirman que podría haberse hecho algún retoque estético para mejorar su aspecto. A pesar de tener solo 21 años, se habla ya de operaciones de nariz y labios y de "bichectomía" (quitarse la cara de pan, hablando en plata) entre otras cosas.
Pero no solo ha sido un cambio físico radical el que ha experimentado Torres, también mental, porque ahora que en lo personal le va tan bien con su chico, parece que Mar se ha animado a mostrar un poco más de sí misma (o mucho más, a juzgar por las fotos en escuetos biquinis o lencería que muestra), por lo que ha abierto su Instagram y ha dejado ver un estilo de vida envidiable en el que predominan los lujos, las fiestas y los viajes y las fotos posando sexy y dejando ver gran parte de su nueva y espectacular anatomía. Algo hasta hace poco inimaginable en ella.
Lo que queda claro es que la joven va camino de convertirse en toda una influencer, ya que siempre sube imágenes vestida a la última moda y con ropa de marca, además de que ya ha reunido algo más de 10.000 seguidores en Instagram.
Hace poco se dejaba ver en una fiesta con Oriana Marzoli, extronista, exsuperviviente, exgranhermana y muy alejada de lo que hasta ahora se le presuponía el círculo de amistades a Mar Torres, procedente de una familia de mucho parné, como se hacía eco este martes Beatriz Miranda en su columna de El Mundo: "Su abuelo, el empresario Tomás Fuertes, que aparecía en el número 24 de la lista publicada por Forbes, es propietario del grupo Fuertes, un holding que se valora en 1.000 millones de euros. Entre la veintena de sociedades que engloba este conglomerado empresarial, destaca la industria cárnica El Pozo, que da trabajo a miles de personas".
Será por eso que Miranda alucinaba en su tribuna con Mar Torres haya girado tanto para alejarse cada vez más de las Victorias Federicas (su cuñada, por cierto) o las Tamaras Falcó y acercarse en cambio a "lo peor de Kim Kardashian y Kate Moss en la misma receta": "marcar culamen y mirar al infinito con ojos vidriosos".
Ya empiezan a proliferar en las columnas y en los mentideros rosas las especulaciones sobre lo que andará pensando la Familia Real, y concretamente la Infanta Elena, o los abuelos de Froilán, por no decir su tío Don Felipe, tan atentos como están siempre el Rey y la Reina Letizia a cualquier gesto o salida de tiesto que pueda perjudicar a la imagen de la Corona.