El impactante cambio físico de Begoña Gómez tiene una explicación muy mundana

La última aparición de Begoña Gómez junto a su marido, Pedro Sánchez, y los Reyes de España en el Palacio Real para la recepción de los líderes asistentes a la Cumbre del Cambio Climático que se celebra en Madrid dejó muchos titulares y provocó no poca comidilla en los mentideros más sociales por el impactante cambio de look y de aspecto de la esposa del presidente del Gobierno en funciones.

Begoña Gómez apareció muy cambiada tal como se comentó en medios y titulares y no solo porque se ha cambiado el corte de pelo recortando unos centímetros su otrora larguísima melena y capeando la parte delantera. También lo ha oscurecido un par de tonos.

Pero el hecho de que su cara luciera mucho más respladeciente se debe, según recoge Gemma Martos en La Razón, a motivos tan sencillos como mundanos: tratamientos de belleza para que su rostro luzca más terso y luminoso, con los pómulos más prominentes y el surco nasogeniano menos marcado ("prueba evidente de las infiltraciones de vitaminas y ácido hialurónico").

Por otro lado, la ausencia de arrugas en el entrecejo delatarían los pinchazos de botox.