¿Quién ha cobrado supuestamente la exclusiva de Campanario y Jesulín de Ubrique?

Jesulín de Ubrique y María José Campanario vuelven a estar en el candelero del corazón y regresan como no podría ser de otra manera, por la vía de la exclusiva en la revista Hola. Algo que veríamos de lo más normal si no fuese porque en el contenido de la entrevista confirman cuestiones que en otro tiempo negaron por activa y por pasiva: ¿Han atravesado crisis en su matrimonio?, si es así, ¿por qué nunca lo han reconocido?, ¿ha comercializado María José Campanario con su enfermedad?, ¿han cobrado por la exclusiva?

Las respuestas a estas preguntas las encontramos en el posado de 11 páginas que la pareja hace para Hola en Ambiciones y en cuyo texto se aclara que: “María José ha colaborado en este reportaje desinteresadamente”. Lo primero que te preguntas conociendo el percal, es ¿por qué lo hace desinteresadamente si siempre ha cobrado este tipo de reportajes?, pues sencillamente porque habla largo y tendido de su enfermedad, algo con lo que ella siempre ha negado haber comercializado.

Sin embargo, en esta exclusiva da detalles del porqué de sus frecuentes ingresos hospitalarios (es alérgica a la medicación intravenosa y tiene que estar en observación cuando se la ponen): “Desgraciadamente, he tenido que aprender a vivir con mi enfermedad. Es mi compañera de vida y hay que vivirlo así”.

Deja caer también que las críticas que ha recibido en estos años le han pasado factura y que incluso podrían “haber influido alguna vez” en su enfermedad: “No lo escondo. Hubo un momento en el que necesité ayuda psiquiátrica”. A sus 41 años siente que ha cambiado y que ahora maneja mejor las situaciones.

Volviendo al cobro o no de la exclusiva, la revista deja claro que María José no ha cobrado, pero no alude al otro 50% del reportaje, es decir Jesulín de Ubrique, ¿qué quiere decir esto?, que es más que probable que quien haya facturado haya sido el torero, y que por lo tanto todo queda en casa. Vamos, que estas navidades, el turrón llega más dulce a Ambiciones.

No es nuevo que en ocasiones y según el momento que vivan los protagonistas, estos juegan con la ambigüedad en sus respuestas o más bien a responden con medias verdades, e incluso niegan la mayor cuando se les pregunta por un asunto que no están interesados en airear. Campanario y Jesulín celebrarán en septiembre su vigésimo aniversario de relación.

En estos 20 años han sido numerosísimas las crisis que se les han atribuido a la pareja, unas veces más fundadas y otras menos, sin embargo ellos lo han negado siempre con absoluta rotundidad. Es María José quien reconoce al fin, que como cualquier hijo de vecino y con tantos años juntos, lo raro sería no haber tenido altibajos en la vida conyugal y asegura haber sufrido crisis como “todos los matrimonios”.

Campanario reconoce que tuvieron ese bache matrimonial cuando volvió a estudiar Odontología; fue una época en la que afloraron rumores de crisis en la pareja, pero ellos como siempre, lo negaron. Han pasado años y es ahora cuando la de Castellón reconoce que : “Tuve que reafirmarme y hacer mucho hincapié en estudiar. No es que mi marido no quisiera que tuviera una vida… Hay personas que viven los cambios de una manera complicada”.

De esto y muchas cosas más habla la pareja esta Navidad, con sonrisa permanente de posado en toda regla y con lo que todo ello conlleva.

Quien ha saltado a las redes sociales como una auténtica bomba ha sido Pipi Estrada y un audio erótico que se le atribuye y que se ha hecho viral en Twitter, llegando a ser trending topic durante unas horas al alcanzar más de 25.000 reproducciones. Se trata de un audio de alto contenido erótico que supuestamente Pipi habría enviado a alguna amiga vía Whatsapp y que sin saber cómo ni porqué ese audio ha llegado a las redes.

Por su parte, Pipi desmentía tajantemente en Espejo Público ser el autor de ese mensaje: “Es una voz distorsionada, no es mi voz, ese no soy yo”. El comentarista deportivo lo atribuía a la posibilidad de que fuese una broma de algunos imitadores suyos como son los componentes del Grupo Risa de la COPE, pero ellos lo han desmentido rotundamente: “No tenemos tan mal gusto”, apostillaban, de hecho me consta que ni siquiera conocían la existencia de este audio.

Ahora queda ver que hará Pipi si este audio sigue circulando por las redes porque, independientemente de que ese whatsapp sea o no suyo, lo cierto es que es un delito difundirlo porque atenta a la intimidad. La persona que lo haya difundido puede enfrentarse a la pena por revelación de secretos que podría oscilar de los tres meses al año de cárcel. Poca broma con el asunto, aunque si algo tiene Pipi es que no se achanta a la hora de dar explicaciones aún de lo más íntimo, eso sí, con mucho sentido del humor, naturalidad no le falta.