ESdiario

Omar Montes cautiva La Sexta con la anécdota que explica por qué gusta a todos

Algo tendrá el agua cuando la bendicen, dice el refrán, y algo tendrá que tener el cantante para que suela caerle bien a todo el mundo... La última anécdota puede echar algo de luz al asunto

Omar Montes es tan natural y espontáneo que suele caer bien a todo el mundo.

Publicado por
Maribel Fernández

Creado:

Actualizado:

Poca gente se resiste a los encantos de Omar Montes, el hombre que cae bien a todo el mundo, hasta el punto que Isabel Pantoja siguió invitándole a su casa por Navidad cuando ya no solo no era el novio de Chabelita, sino que la hija de la tonadillera ya tenía novio nuevo...

Después de pasar este jueves el testigo de ganador a Jorge, Omar se dejó caer el viernes por el plató de Zapeando y volvió a demostrar a los colaboradores de La Sexta con sus anécdotas por qué nadie se resiste a sus encantos.

Y es que entre otras cosas explicó por qué vendió definitivamente el Ferrari que se había comprado y enterneció hasta a los espectadores más duros. No, no fue por problemas económicos sino por algo mucho más importante: su abuela.

"Mi abuela entraba a plomo, pero se quedaba encasillada y para salir teníamos que ir cuatro cinco a sacarla", explicó entre bromas y veras.

Y es que el cantante aseguró que él lo usaba hasta para llevarla al médico: "Toda la vida he ido al colegio con parches que me ponía mi abuela en los pantalones, porque las cosas estaban mal. Siempre me dice 'hijo, si ibas tan contento con tus parches, por qué no con tu Ferrari, que te lo has ganado'. Se venía conmigo tan orgullosa e iba saludando con su manita".

La relación del cantante con sus abuelos es muy especial. De hecho, Omar Montes asegura que se lleva a su abuela a todos sus conciertos: "Si no canto hasta las tres de la mañana da igual, ella se toma su agua tan contenta".

"No quiero pensar el día que me falten", explicó compungido el artista, que añadió que con la crisis del coronavirus ha extremado las precauciones con ellos: "Les llevo lo que necesiten y les pido que no salgan, que ya habrá tiempo. A diario les visito y les llevo sus cosas y así no les dejo que se expongan hasta que mejore la situación".

tracking