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La ampliación de la demanda de divorcio hunde más la imagen de la ex de Mainat

De vez en cuando Ángela Dobrowolski lanza informaciones que hacen dudar a los más fieles seguidores de este culebrón televisivo de su culpabilidad pero lo que saben los Mossos no ayuda.

Ángela Dobrowolski.

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Pese al paso de los días y de que la orden judicial por la que Ángela Dobrowolski deberá abandonar la vivienda de Josep María Mainat se ejecutará en los próximos días, la exmujer del productor continúa instalada en el que un día fue el domicilio conyugal de la pareja y, por lo que parece, no tiene pinta de moverse de allí.

Tras el comunicado que la propia Ángela hizo público recientemente asegurando que no había intentado asesinar a su exmarido, afirmando que hay dos procedimientos abiertos contra Mainat por violencia de género y sosteniendo que en caso de separación acordaron que la guardia y custodia de sus dos hijos sería para ella, está preparándolo todo para contraatacar y luchar por demostrar que es inocente de todas las acusaciones.

Para ello, y oculta bajo una de sus características pelucas (en esta ocasión negra, combinada con su ropa y las gafas de sol con la que evitó que pudiésemos verla con claridad) Ángela salió al garaje de la casa en la que continúa atrincherada para recibir, entre otras visitas, la de sus abogados.

Los representantes legales de Dobrowolski, muy discretos, confirmaron que es la primera vez que se reúnen con ella en la casa de la discordia "desde que todo ha estallado", y aseguraron que la ex del productor se encuentra "bien".

Sin embargo, siguen trascendiendo detalles del Caso Mainat que no dejan en muy buen lugar a Ángela. De hecho, según informó este martes El Programa de Ana Rosa, los Mossos tienen registro de todos los movimientos que dio en agosto de 2020, ya que las autoridades tuvieron que intervenir hasta en seis ocasiones ese mes para intentar frenar sus ataques a su propio marido, a su hermana y a uno de los empleados de la casa.

El magacín ha accedido a la ampliación de la demanda de divorcio de Mainat a su mujer. Según el documento, 45 días después de presunto intento de asesinato, el día 6 de agosto "Ángela agredió presuntamente a su hermana que estaba instalada en el domicilio familiar y la retuvo en al terraza", dos días más tarde, el 8 de este mismo mes, agredió presuntamente a Josep María "se presentó a las 22:00h en la residencia de Mainat, donde este se encontraba de vacaciones. Ella terminó agrediéndole, le mordió en el brazo". A ese mismo domicilio volvió 11 días más tarde, Ángela se presentó en la puerta gritando que pasaba hambre y fueron los vecinos quienes llamaron a los Mossos, pero esto no sirvió para mucho.

Dobrowolski volvió al día siguiente, 20 de agosto, intentó acceder a la vivienda trepando por las terrazas de alrededor hasta legar al balcón de la casa de Mainat, donde pasó la noche según el escrito: "Al día siguiente consiguió acceder al inmueble y se atrincheró en un armario. No abandonó la vivienda hasta que intervinieron los Mossos d'Esquadra", pero antes de marcharse dejó un teléfono móvil, un micrófono espía y una tarjeta, con intención de espiar las conversaciones del productor de televisión.

Además, el 24 de agosto hay una demanda más, este día la acusada persiguió en su coche a un empleado de Mainat, embistiéndole en varias ocasiones e incluso poniéndose delante del vehículo para propiciar que le atropellara.