Toñi Salazar confiesa la auténtica pesadilla que le está pasando factura
Afortunadamente la cantante de Azúcar Moreno no padece coronavirus pero la ansiedad, el estrés emocional y la tristeza la acechan día a día desde hace unos meses y nos ha confesado qué pasa.
Llevamos meses arrastrando una pandemia que parece no tener un fin inmediato, se ha llevado por delante a miles de personas, en muchos casos repentinamente. El dolor, la angustia y también el miedo se han apoderado inevitablemente de la ciudadanía en algún momento de estos últimos nueve meses.
Hablamos a menudo de las secuelas físicas que deja la COVID 19, pero no podemos olvidar el impacto psicológico, social y económico que ya está pasando factura a la población.
En “La Espuma de los Días” hoy nuestra protagonista es Toñi Salazar de Azúcar Moreno, una artista con un una dilatada carrera profesional que se remonta a más de 30 años en los escenarios, y que a día de hoy está viviendo uno de los momentos más difíciles.
Afortunadamente Toñi no padece coronavirus pero la ansiedad, el estrés emocional y la tristeza la acechan día a día desde hace unos meses. En ESdiario nos confiesa cuales son sus verdaderas pesadillas: “Continúo confinada en mi casa, apenas salgo, hago muy poca vida social porque al margen de las restricciones no me apetece socializar mucho. Me siento desanimada, triste y con mucha pena por no poder hacer lo que más me gusta que es cantar”.
Acostumbrada a una vida activa social y profesional, Toñi como cualquier otra persona, ha visto truncados muchos proyectos, deseos e ilusiones que ahora tendrán que esperar: “Tengo la esperanza de que todo esto termine y podamos retomar una vida normal, pero no puedo evitar sentirme triste y apagada. Se han anulado varios conciertos que teníamos previstos, aunque ahora mi hermana Encarna y yo estamos pendientes de irnos a en noviembre a Ecuador donde presentaríamos temas de nuestro último disco El Secreto".
Sería una semana de conciertos que me daría el ánimo que necesito. No sabemos si podremos viajar o si se suspenderán los conciertos”. La tristeza de Toñi Salazar no ha pasado desapercibida para su hijo Borja quien hace unos días se presentó en casa de su madre con un karaoke para que se arrancase a cantar y se le fuesen las penas. Sin duda alguna lo consiguió y estas imágenes lo
demuestran, así fue el improvisado concierto con el que Toñi y su sobrina, componente del grupo Alazán deleitaron solo a parte de la familia, porque las restricciones actuales tampoco les permitieron reunirse al completo: “Nos reunimos en casa de mi sobrina Encarnita, y lo pasamos genial, cantar me da la vida, lo necesito”.
Decepcionada con el amor: "Nunca me han querido, estaban conmigo por interés"
Toñi nunca ha tenido “pelos en la lengua”, no le cuesta expresar sus sentimientos y sus decepciones: "En estos meses he pasado mucho tiempo sola y me he dado cuenta de quienes realmente me quieren y también a quienes quiero desterrar de mi vida".
"Sin ir más lejos la persona que más me ha decepcionado es Pedro, mi expareja, con él estuve más de 20 años, vivió el momento más boyante de mi vida a todos los niveles, le entregué mi juventud y puse en sus manos mi talento artístico, que sin duda le ayudó a él a abrirse camino en la industria", lamenta.
"Me separé de él queriéndole mucho, puedes desenamorarte pero no por eso dejar de querer. Creo que él nunca me ha querido, ni siquiera cuando estábamos juntos, lo suyo era puro interés porque conmigo tenía todo lo que quería y vivía como un marqués. ¿Por qué lo pienso ahora?, pues porque en estos momentos en los que lo estoy pasando mal él no está ahí como amigo ni como nada. Ha desaparecido por completo, es fácil estar cuando las cosas van bien y estás en la cresta de la ola, pero cuando te falla el trabajo, la economía y estás baja de ánimo los que no te quieren desaparecen", se queja.
"También me duele que Pedro le haya fallado a mi hijo, Borja lleva sus apellidos y ahora mi nieta también y ni siquiera les llama para saber de ellos. Estoy decepcionada con el amor, los hombres para mi importantes que han estado conmigo se han aprovechado de mi por quien soy y por lo que represento, siento que no han querido a Toñi, sino a Azúcar Moreno. Sé que algún día todo cambiará y volveré a ser feliz, tengo ese presentimiento”, aventura optimista.
“Seguro que sí Toñi, piensa que el amor siempre puede estar a la vuelta de la esquina”, le respondo, consigo arrancarle una carcajada, ¿quién sabe?...