Losantos llama a Bertín Osborne para advertirle del error que no debe cometer
El locutor tiene información de primera mano sobre la separación más sonada del nuevo 2021 y no ha dudado en pedirle que le haga una promesa con no poca mala leche.
El culebrón de la separación entre Bertín Osborne y Fabiola Martínez ha venido a sustituir a la telenovela de la ruptura de Enrique Ponce y Paloma Cuevas, Ana Soria de por medio, también en la mesa rosa de Es la mañana de Federico Jiménez Losantos.
En la sección protagonizada por el propio locutor junto a Isabel González, Beatriz Cortázar y Carlos Pérez Gimeno no podía faltar el bombazo Bertín-Fabiola y Losantos aseguró que Osborne está "bien" pero "dicho de una manera que está mal".
En una conversación entre los dos, el locutor le dijo que "lo único que me prometiera que no se pusiera a torear caniches", en clara referencia a Enrique Ponce, que ha ocupado no pocos minutos en la sección rosa del programa: "Entonces cambió el tono lúgubre y nos reímos un rato. Él estuvo en esto con Paloma Cuevas, no por la separación sino por la forma de hacerlo".
Según Cortázar, aunque "Bertín no esta para bailar sevillanas tampoco con la lágrima. Es su decisión. Yo le dije que si era seguro o no, si podían volver. Y me dijo "no, esto no es una cosa de un calentón ni que haya pasado algo. Ni hay terceras personas ni tengo necesidad o ganas, es la última de sus prioridades. Ya venía pasando, es convivencia, es discutir por la mañana por todo, es chocar, y cuando te acuestas y estas todo el día encabronado por nada es una convivencia muy desagradable".
Algo en lo que coincidió Losantos: "Pensaban muy distinto de demasiadas cosas, y en una pareja que está con la tensión de cuidar de su hijo Kike". Todo ello sumado al trabajo, que obliga a Osborne a estar "menos tiempo en casa" del que desearía. Por no hablar de que a él le gusta vivir en su finca de Sevilla, en el campo, y ella prefiere la capital: "Él estaba en Madrid por deferencia a Fabiola pero le apetecía estar en el campo con sus caballos".
En cuanto a lo que sucederá a partir de ahora, en principio el presentador se fía totalmente de su mujer a nivel económico: "Le he dicho que lo haga todo ella porque a todo le voy a decir que sí", ya que ambos están de acuerdo en que su prioridad es el bienestar de los niños.
Cortázar está convencida de que "ellos no van a convivir pero van a seguir siendo una familia. Mientras no aparezcan terceros o terceras, al menos".
Pero ese, precisamente, puede ser el gran error de Osborne a juicio de Losantos, que piensa que el divorcio deben de llevarlo "terceras personas que están a tus intereses, porque luego cuando se pasa el momento malo y la lágrima, y si el acuerdo es generoso te das cuenta de que te has quedado sin nada. La historia demuestra que lo mejor para quedar bien es que se haga con abogados, y con rapidez".