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Campanario: "Soy muy consciente de lo que he hecho. Ahora no estoy medicada"

La mujer de Jesús Janeiro habla en exclusiva para ESdiario sobre la amenazadora y devastadora carta contra Belén Esteban que ha hecho pública en las redes sociales.

María José Campanario

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Rotunda. Contundente. Segura. Sin titubear. Así se ha mostrado María José Campanario a las 17 horas de este sábado 6 de febrero cuando se ha dirigido a ESdiario para hablar de lo sucedido en la madrugada del pasado viernes. Hace unas horas, este diario publicaba en primicia la carta que enviaba la mujer del torero Jesulín de Ubrique a Belen Esteban. Una carta que abre “la caja negra” del corazón como ha sucedido hace tan sólo unas semanas con las declaraciones de Kiko Rivera sobre su madre Isabel Pantoja. El pasado siempre vuelve.

Sin tabúes y sin ambages ha querido hablar para este diario. “Estoy cansada. Y mi hartazgo llegó cuando mi hija Julia me llama ayer tarde para decirme que están hablando de mi en el programa 'Sálvame'. Estoy muy cansada. A las cuatro de la mañana me puse a escribir. Me dio ansiedad de lo que me contaron los que vieron el programa. Estoy harta de la mentira. Y de muchas mentiras a lo largo de muchos años. Harta” explica Campanario.

“Ha llegado el momento de contar la verdad. ¿Me van a coartar a mi? ¿Por qué? Yo soy libre. Yo si soy libre. Y muy libre. Y no he necesitado que me paguen en una respuesta para hablar. Lo hago porque estoy cansada. Quien quiera hablar que hable. Yo también sé hacerlo. Y lo hago sin peajes. Llevo años escuchando que qué hago cuando mi marido se va al campo. Dejadme en paz. He hecho mi vida sin necesidad de hablar de nadie. Soy independiente”.

María José Campanario no se arrepiente de las palabras altisonantes de su carta. Está en plenas facultades para contar lo que ha contado. “Soy muy consciente de lo que he hecho. Ahora no estoy medicada”. “Quizás a mi representante legal le parezca mal mi reacción. Lo entiendo. Pero llega un momento en el que uno estalla. Ha llegado el día. Y lo hago gratis. Sin cobrar. No todo tiene un precio . Me puede más el sentimiento que la razón. Esto es insoportable” puntualiza.

“Mi red social de Facebook es privada. A las cuatro de la mañana estábamos sólo 3 personas. Y sé quién lo ha filtrado. Me da lo mismo. Es su conciencia. Yo sí sé quién lo ha hecho. Esto es una traición. Vuelvo a repetir, una cosa es los que hacen público lo privado y otra cosas es lo que realmente pienso. Y lo pienso”, explica.