La romana con la que el Emérito pasó la noche antes de pedir matrimonio a Sofía
Cuando parecía ya imposible que el periodista especializado en Casa Real todavía tuviera alguna anécdota morbosa sobre Don Juan Carlos sin publicar ha vuelto a sorprender a casi todos.
Cuando parecía que ya práctimente era imposible publicar más anécdotas escandalosas del Rey Emérito, es más, cuando parecía imposible que Jaime Peñafiel todavía tuvira anécdotas que contar no contadas de ahí está su nuevo libro Los Reyes también lloran centrado en la figura del padre de
El periodista especializado en la Casa Real sigue desvelando secretos del Monarca y en su nuevo texto saca a la luz vivencias, anécdotas, amoríos e intrigas palaciegas que afectan directamente al Rey Juan Carlos, al que conoce estrechamente y de quien no ha dudado en mostrar sus luces y sombras.
La revista Pronto ahonda con su colaborador en alguna de las más jugosas anécdotas que publica el libro, como cuando a los 18 años, se prendó de una romana, Olghina de Robilant, tres años mayor que él.
Según Peñafiel, aunque su gran amor fue María Gabriela de Saboya, Olghina fue el primero. Más aún, el día antes de pedir la mano a Doña Sofía, vivió con ella una noche de pasión en Roma.
El periodista va más allá y asegura que "esa noche se perdió el anillo de pedida. Olghina se lo probó y se le cayó, y se pasaron parte de la noche buscándolo. Fue el anillo que en la comida de la pedida, Don Juan Carlos le lanzó a diciendo: "Sofi, ¡cógelo!".