La prueba evidente de que a Isabel Pantoja le ha pasado factura su guerra filial
A pesar de las sonrisas y de su amabilidad en la presentación oficial de su nuevo proyecto laboral con Mediaset, la cantante no pudo evitar que más de uno se llevara las manos a la cabeza.
Isabel Pantoja reapareció más delgada que nunca ante las cámaras.
Hace unos días, en su primera reaparición pública en casi 8 meses, ya se pudo comprobar que tras su guerra familiar con sus propios hijos que la ha llevado a estar prácticamente enclaustrada en Cantora.
Sin embargo, fue este jueves durante la presentación ante las cámaras de los medios de su nuevo cuando todo el mundo pudo tomar conciencia de la increíble y considerable pérdida de peso que ha experimentado la cantante.
Arropada por sus compañeros del nuevo talent show de, Risto Mejide y Danna Paola, la aparición de Pantoja impactó mucho por su extrema delgadez. Parece que a pesar de su sonrisa y naturalidad es evidente que los disgustos le han pasado factura de una manera muy drástica.
Aunque se sabía que había perdido varios kilos en los últimos meses a raíz del enfrentamiento con pocos se podían imaginar el verdadero calibre del cambio en su aspecto físico.
Y es que la tonadillera parece otra. Lejos ha quedado esa mujer voluptuosa que presumía de curvas y movía la bata de cola sobre el escenario, ya que actualmente Isabel Pantoja esta delgadísima y no queda ni rastro de su antigua figura.
Con un pantalón pitillo negro que ha combinado con un amplio blusón en tonos fucsia y azulones, un cinturón ancho marcando cintura y unas altísimas sandalias de tacón negro, la artista acaparó todos los objetivos durante la presentación de su nuevo programa.
Con una mirada que no puede ocultar su tristeza, un maquillaje natural e intentando lucir la mejor de sus sonrisas, la viuda de Paquirri lució la cara despejada al recoger su larga melena negra en una coleta tirante. Como complementos, unos modernos pendientes largos y varios anillos en su mano derecha.
Muy guapa en su reaparición, Isabel derrochó complicidad con sus compañeros y posó pacientemente para los fotógrafos, intentando mostrar su mejor cara en uno de los momentos más complicados de su vida.