Corredera echa a otro colaborador por anti-Carrasco y Sálvame se dispara
La presentadora se ha aupado a lo más alto de los titulares a raíz de la serie de la hija de Rocío Jurado y no está dudando en quitarse del medio a todo el que se le ponga delante.
Desde que comenzó la serie dese ha erigido en adalid de la causa de la hija de Rocío Jurado al más puro estilo o estás conmigo o contra mí y así lo volvió a demostrar este lunes en Sálvame.Tras amagar con echar a varios colaboradores que dudaban en algún punto o aspecto de la versión íntegra de Carrasco, caso de Jesús Manuel Ruiz, este lunes terminó cumpliendo sus amenazas y echó a Antonio Montero tras amagar a la dirección del programa con irse ella si no.
No obstante, Sálvame no tuvo que responder a este jaque porque Montero se marchó antes.
Todo vino motivado porque Belén Esteban contestaba a unas palabras de la hermana de Olga Moreno sobre las declaraciones de la colaboradora durante estos años del padre de su hija: "Cuando me he equivocado de algo del padre de mi hija he tardado tres días en pedir perdón".
Algo a lo que contestó: "A Jesulín se le ha calificado como mal padre toda la vida. Jesulín con su hija es un mal padre y para mi Rocío con su hija es una mala madre", acordándose de la hija de Rocío Jurado en su argumento, algo que hizo explotar a Corredera.
"Antonio, que se está yendo la presentadora", alertaba Lydia Lozano de lo que estaba por venir.
De hecho, Corredera se levantaba de su asiento y se dirigía al lugar del director para alertar de algo: "No voy a seguir trabajando con Antonio Montero, si se queda en plató yo me voy. No voy a permitir que después de todo lo que hemos contado y de todo lo que hemos explicado, que este señor se permita el lujo de llamar mala madre a Rocío Carrasco delante de mi".
Antonio Montero abandonó el plató tras la amenaza de Carlota Corredera
"Bueno, pues me voy", así abandonaba Antonio Montero el plató de Sálvame. "Te lo agradezco", le decía Carlota tras la decisión de hacerlo de manera voluntaria. El paparazzi se marchó cabizbajo y sin decir nada más.
Tras esto, la presentadora solo quiso añadir: "Se acabó, esto no es un juego, ¿eh?".
Un órdago que no solo le salió bien a ella sino también al programa de Telecinco, ya que este lunes Sálvame comenzó la semana de la mejor manera posible en los audímetros con un 19.3% de cuota de pantalla para la versión Naranja y 1.911.000 espectadores, sus segundos mejores datos del último mes.