El falso montaje con Rodri se transforma en una buena noticia para Adara
Desde que Socialité destapó la presunta traición de su ya exnovio fueron muchas las habladurías que se dispararon en los mentideros pero ya lo dice el dicho, no hay mal que por bien no venga
Adara Molinero.
Dos semanas han pasado desde que el programa Socialité acusara a en la noche madrileña con una misteriosa joven y de que la ganadora de GH VIP rompiera fulminantemente con su novio completamente destrozada, sin querer escuchar las explicaciones del infuencer, que negaba rotundamente esta supuesta deslealtad.
Actualmente y a pesar de que muchos aseguraron que se trataba de un montaje de Adara para tener protagonismo mediático y que pronto se reconciliaría con Rodri tras contar su rutpura en algún plató o revista en exclusiva, nada de ello ha sucedido y los instagrammers continúan sus caminos por separado.
No hay mal que por bien no venga: Adara se acerca a su madre
Pero quizás este desengaño amoroso le haya traído algo bueno a la concursante de realities que, después de varios meses distanciada de su madre, Elena Rodríguez, vuelve a dejarse ver con su progenitora, desmintiendo así su presunta ruptura familiar por el fuerte carácter de Adara, que en los últimos tiempos ha protagonizado enfrentamientos también con su padre, Jesús Molinero, con su hermano Aitor o con el padre de su hijo Martín, Hugo Sierra, y su pareja, Ivanna Icardi.
Así, muy pendiente de Adara en estos complicados momentos a nivel personal tras su ruptura con Rodri, Elena reapareció en compañía de su hija, aprovechando para desmentir un distanciamiento entre ellas. "Estamos bien. Mi hija tiene 30 años, tiene su vida y yo tengo la mía", aseguró la exconcursante de Supervivientes, confesando que "es mi hija y yo la adoro".
"Yo siempre la he apoyado, haga lo que haga, es mi hija por encima de todo", afirmó Elena, desvelando cómo está tras su ruptura con Rodri: "Yo la veo bien. Es su historia y ellos sabrán lo que hay o no hay y lo que habrá pasado. No es cosa mía".